Mauricio Macri firmará esta semana el decreto que establece un nuevo protocolo para intentar generar transparencia en un gobierno que acumula cada vez más denuncias penales en su contra. Este se chocará con la Ley de Ética Pública, que prohíbe que asuma un funcionario que regule a las empresas en las que trabajó hasta tres años antes.
Este polémico protocolo marcará los pasos a seguir para intentar evitar nuevos conflictos de intereses, pero no así los viejos, que están investigados por la Justicia federal. Involucra al Presidente, la vicepresidente, ministros, secretarios de Estado y directores de área de los ministerios.
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La Ley de Ética Pública no permite a un privado ingresar al Estado en un área que tenga bajo su órbita la empresa en la que trabajó o de la cual es dueño.
El Presidente rubricará mañana el DNU para establecer los procedimientos ante conflictos de intereses, según Infobae. Se publicará en el Boletín Oficial el miércoles. La oficialización se realizará 20 días después del anuncio, ante la apertura de sesiones ordinarias del Congreso.
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