Alrededor de 11 mil personas fueron evacuadas este miércoles en Essen, en el oeste de Alemania, para que expertos pudieran desactivar una enorme bomba de la época de la Segunda Guerra Mundial recién descubierta, según informó el gobierno local. Los evacuados volvieron a sus casas luego de que la operación haya culminado con éxito.
Según la agencia de noticias Europa Press, la bomba fue descubierta el mismo día en el barrio Stoppenberg, y constaba de un dispositivo con tres detonadores. Hacia la noche, los trabajos concluyeron con "éxito" y los evacuados pudieron volver a sus casas tras pasar unas horas atendidos por servicios de apoyo desplegados por el municipio.
La operación para desactivarla implicó, además, que otras 27 mil personas debieran cumplir estrictos protocolos de protección del aire mientras la tarea se llevaba a cabo. "En términos tanto del poder explosivo como del tamaño resultante de las áreas restringidas, esta es la mayor desactivación que se llevó a cabo en Essen hasta la fecha", subrayó un comunicado del municipio.
Las consecuencias de la guerra
Con cierta frecuencia, en Alemania se descubren artefactos de guerra en obras en construcción, pese a que hayan pasado más de 70 años del terrible acontecimiento. De hecho, no es la primera bomba con la misma data que se encuentra en el país germano: en diciembre del año pasado, unos 13 mil residentes en la ciudad alemana de Frankfurt tuvieron que ser evacuados tras el hallazgo de una bomba de media tonelada.
En la zona afectada por la evacuación, había residencias de mayores, conducciones de gas, centralitas de internet y vías férreas, por lo que se produjeron varios retrasos en los servicios de trenes de larga distancia. De todos modos, la bomba de fabricación británica pudo ser desactivada sin inconvenientes. Estos artefactos cuentan con un detonador mecánico, por lo que están clasificadas como muy peligrosas.