Las ventas minoristas en los Estados Unidos se situaron al alza en diciembre, con un crecimiento del 0,6% mensual, el mayor ritmo de expansión en tres meses, según informó hoy el Departamento de Comercio.
De la mano de la temporada festiva, las ventas de los comercios minoristas aumentaron 0,6% a un total de US$ 709.900.000, sin ajustar por inflación, mientras que se incrementaron 0,4% si se excluye la venta de automotores.
En ambos casos, las cifras son superiores al 0,4% y 0,2% que anticipaba el mercado, respectivamente.
Este contenido se hizo gracias al apoyo de la comunidad de El Destape. Sumate. Sigamos haciendo historia.
En tanto, en la comparación anual, crecieron 5,6%, por encima del 3,4% de inflación que mostró el Índice de Precios al Consumidor (IPC) de diciembre.
Nueve de las 13 categorías relevadas presentaron incrementos mensuales, con el mayor aumento de ventas en las de indumentaria, negocios y tiendas departamentales, y aquellas realizadas en plataformas de comercio electrónico.
En las concesionarias automotrices, las ventas aumentaron 1,1%, mientras que en las estaciones de servicio bajaron de la mano del menor precio de la nafta.
En la variación anual, los negocios de bebidas y alimentos crecieron 11,1%, mientras que salud y cuidado personal, y electrónica subieron 10,7%.
Otra medición, que excluye las ventas de automotores, material de construcción, estaciones de servicio, bienes de oficina y tiendas de tabaco, creció 0,8% mensual.
El Departamento de Comercio usa este indicador –denominado “grupo de control- para calcular el Producto Bruto Interno (PBI).
Diciembre cierra así un año donde el gasto de los hogares estadounidense, en general, tuvo una tendencia ascendente pese a los temores de los economistas por una recesión.
No obstante, el consenso generalizado es que este año las ventas se estancarán, de la mano de la inflación, el encarecimiento del crédito y la reducción de los ahorros.
“Creemos que habrá una ralentización, de la mano de la desaceleración del desempleo y del salario, al igual que el impacto –aún retrasado- de las mayores tasas de interés. Pero hay poco que sugiera que haya una brusca caída”, comentó Andrew Hunter, economista en jefe de Estados Unidos de la consultora Capital Economics en una nota citada por la agencia Bloomberg.
Por su parte, la economista Estelle Ou, destacó que el gasto “fue robusto” en diciembre pese “a las subas de tasas de la Reserva Federal y el enfriamiento del mercado laboral”.
Los datos publicados por el Departamento de Comercio toman mayormente al consumo de bienes, lo cual implica sólo una porción del consumo total, el cual incluye también a los servicios.
Por otro lado, en un reporte separado, la FED indicó que la producción manufacturera estadounidense prácticamente no presentó cambios en diciembre, cerrando el año con crecimiento más débil del sector desde 2020.
Con información de Télam
Cerrar sesión