Murió Carl Weathers, el increíble Apollo Creed en la saga Rocky

El actor que encarnó al primer rival de Rocky Balboa en las películas que llevaron a la gloria a Sylvester Stallone, falleció a los 76 años.

02 de febrero, 2024 | 17.07

Carl Weathers, actor que interpretó al boxeador Apollo Creed en cuatro de las seis películas de la saga Rocky junto a Sylvester Stallone, murió este jueves a los 76 años. La noticia fue confirmada por su mánager Matt Luber al portal de noticias Variety.

Entre los créditos de Weathers se encuentran Predator, de 1987, Happy Gilmore, de Adam Sandler, donde tuvo un papel recordado, y The Mandalorian, la serie del universo Star Wars con Pedro Pascal. Por este último trabajo fue nominado a un premio Primetime Emmy como actor invitado.

También fue actor de voz componiendo a Combat Carl en la franquicia Toy Story y se auto parodió en la comedia Arrested Development, en un papel recurrente. Street Justice, Colony, The Shield, Chicago Justice y Brothers, Close Encounters of the Third Kind, Death Hunt y The Comebacks son otros de las series y películas donde estuvo.

Weathers nació el 14 de enero de 1948 en Nueva Orleans y durante su juventud practicó todo tipo de deportes incluido el boxeo, que más adelante sería una puerta de entrada para unirse a la saga Rocky. En las películas de Sylvester Stallone compuso a Apollo Creed, primero rival y luego amigo del protagonista. El personaje estuvo en cuatro de las seis películas de la saga y su trágico final es en el ring, en una de las escenas más impactantes de la franquicia como lo fue su batalla contra el ruso Iván Drago, su ejecutor.

Tristeza absoluta: El deprimente final de Rocky que jamás vio la luz

Rocky es una de las mejores películas de la década del '70, una de las más taquilleras y la ganadora de dos premios Oscar (a Mejor película y Mejor director en 1976). Puede decirse que fue la cinta que catapultó a la popularidad a Sylvester Stallone, que no solo la protagonizó sino que también fue el autor del guión. Si bien todos recuerdan el mítico cierre del primer filme de la saga -Rocky pierde a los puntos contra Apollo Creed pero gana la victoria moral- el plan inicial era darle un final mucho más sombrío que jamás vio la luz. 

Haciendo un repaso por el final del largometraje, una vez que se ha declarado a Creed como campeón a los puntos, los periodistas se abalanzan sobre Rocky; él es quien se ha llevado la victoria moral que rematará en futuras películas. Pero al personaje no le importa nada de eso, solo quiere ver a Adrianne, la chica de la que está enamorado (interpretada por Talia Rose Coppola). Rocky la llama a gritos, la busca entre la multitud a pesar de que casi no puede ver debido al castigo al que Creed le ha sometido durante la pelea. Adrianne se va abriendo camino entre el público que ha asistido a la pelea, consigue subir al ring y se funde en un dramático abrazo con el que acaba la película.

En realidad, ese final fue el segundo que se rodó tras las críticas del público que asistió a las funciones de prueba. El primero, también escrito por Stallone, tenía un tono mucho más melancólico. En la versión original, tras la victoria de Apollo Creed, Rocky baja del ring y se encamina a los vestuarios, derrotado. De camino, en el túnel se encuentra con Adrienne y allí, en soledad, se declaran su amor. Se cogen de la mano y siguen caminando hacia los vestuarios. Es el principio, suponemos, de una nueva vida juntos.

Lo cierto es que al público no le gustó ese final tan sombrío y los productores consideraron que había que filmar otra conclusión, menos poética pero más impactante. Modificada la escena final, se convirtió en una de las más icónicas del cine hollywoodense. Como a Stallone le seguía gustando el final descartado, quiso ecuperar escenas del metraje para insertarlas en Rocky V (1990) pero eso no fue posible porque descubrió que los negativos habían sido destruidos por el estudio. De cualquier forma, en los posters promocionales de Rocky se utilizaron imágenes de ese final que jamás vio la luz y que jamás la verá, dado el fatídico destino de un archivo fílmico que bien podría ser revalorizado por el fandom de la saga.