En distintos puntos del país, las inmobiliarias comenzaron a abrir bajo protocolos sanitarios

La actividad en el conurbano aún es difícil pero podría haber novedades en los próximos días. En CABA comenzarán a funcionar el jueves.

11 de mayo, 2020 | 17.31

Con la cuarentena flexibilizada, gracias a la contención de la curva de contagios de coronavirus, implicó que muchos comercios, empresas y fábricas pudieran comenzar a abrir sus puertas de forma progresiva. Las inmobiliarias están dentro de estos rubros. En las últimas semanas, fueron foco de crítica por la falta de mecanismos electrónicos de pago o, según las organizaciones que agrupan a los inquilinos, amenazas de desalojo. Sin embargo, desde el sector aseguran que tuvieron que mutar en forma veloz a una modalidad virtual y se convirtieron en una especie de “delivery” de los inmuebles. Ahora, con la vuelta paulatina a la actividad, esperan comenzar a normalizar su situación.

Alejandro Bennazar, presidente de la Cámara Inmobiliaria Argentina (CIA), comentó a El Destape que comenzaron a abrirse oficinas en distintos sectores. El organismo había confeccionado un protocolo para esta situación y, junto a otros que pudieran aplicarse para enriquecerlo, en la Ciudad de Buenos Aires empezarán a funcionar a partir del jueves en el horario de 11 a 21. En el conurbano la situación es más complicada, por las distintas realidades pero en la zonas alejadas del AMBA, en provincia de Buenos Aires, ya iniciaron los trabajos. Ese es el caso de San Pedro, por ejemplo, que abrió la atención de 9 a 13 o de Baradero, de 10 a 16. Son horarios limitados.

La situación no es la misma para todas las zonas porque “cada provincia, ciudad y realidad impone su especificación en día y horario”. En todos los casos, se necesita la autorización del Ministerio de Salud provincial y, sobre todo quienes están en fase 3, del nacional. Por eso, “en el conurbano por ahora no hay muchas expectativas, pero hoy o mañana puede salir un comunicado” que analice el panorama y brinde expectativas. Por lo pronto, quienes abran deberán cumplir ciertas normas: el protocolo tiene que estar en vidriera, adentro, afuera y en los portales de Internet. También será obligatorio respetar la higiene y distancia social por lo que se impone la modalidad de atención por turnos pero cada oficina lo aplicará según la realidad del lugar en que se encuentre.

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El protocolo elevado por la CIA es el general, el que tomó San Pedro para comenzar a funcionar, pero puede pasar que otras ciudades le agreguen algunas pautas nuevas. En principio, se estipula que las inmobiliarias sólo serán atendidas por sus dueños o el corredor, martillero y matriculado responsable. De forma eventual, lo hará el personal designado por el dueño. El ingreso a las instalaciones sólo será permitido previa higiene con alcohol en gel y no se permitirá la presencia de personas mayores, embarazadas, niños o cualquiera que integre el grupo de riesgo determinado por el Ministerio de Salud.

El acceso deberá estar sujeto al espacio físico de los lugares de atención para garantizar el distanciamiento social y en caso de que haya ascensor, éste podrá ser utilizado sólo por una persona a la vez. El alcohol en gel deberá estar a disposición del cliente, así como un baño para higienizarse las manos en caso de requerirlo.  “Tenemos que cuidar la posibilidad que nos están dando para no volver atrás. Que podamos, entre todos, salir de ésto”, aseguró Bennazar.

Además, los locales deberán limpiarse preventivamente antes y después del inicio de actividades del día, con desinfectante y la apertura estará limitada al pago y cobro de alquileres, entrega de llaves para nuevas locaciones (donde las mudanzas estén permitidas) y acciones que se consideren esenciales. No obstante ello, aseguran que fomentarán el pago a través de medios electrónicos y depósito bancario. En una encuesta realizada a los afiliados a al CIA, el 60% aplicó estas modalidades, pero aún queda un 40% restante que no pudo abonar durante estos meses de cuarentena.

Una encuesta realizada de modo electrónico por la Federación Nacional de Inquilinos sostuvo que “aún el 43,9% del mercado inmobiliario sigue incumpliendo el artículo sobre bancarización obligatoria hasta el 30/9 de los pagos relacionados con el alquiler”. Además, el estudio arrojó que, respecto al pago del alquiler de mayo, “un preocupante 59% de los inquilinos no podrá hacer frente a este gasto, lo que respecta una suba de de casi 17 puntos porcentuales” un aumento “comparado con abril, donde el 42,1% no podía” hacerlo.

Si las mudanzas están permitidas, las visitas a los inmuebles deberán garantizar la distancia social y se promoverá el uso de tecnologías para hacer videos que faciliten la visión de la propiedad. Ésto es importantísimo porque, según destacaron desde la Agrupación Nacional de Inquilinos, una persona tiene que poder asegurarse del correcto funcionamiento de todos los servicios, como agua, luz y gas, así como ver problemas de humedad, espacio, iluminación y todos los factores que uno pueda imaginarse a la hora de definir alquilar o comprar.

El Presidente de la CIA aseguró que el pago de inmuebles habitacionales estuvo dentro de los parámetros esperados, sin demasiado conflicto, pero el comercial se topó con diversos factores, ya que algunos pudieron abrir y otros no. Los que abrieron, bajaron sus ventas por los que algunos optaron por estirar los pagos o hacerlo en cuotas. Los que cerraron están en etapa de negociación. “Hoy es el primer día en que se va a salir a solucionar estos problemas con turnos y reuniones”, sostuvo.

Además, informó que cada inmobiliaria, a nivel nacional, maneja un promedio de entre 70 y 80 contratos. “Es la oportunidad de estar mano a mano con la persona, es un intermediario de partes. Si no puede pagar, se va a patear, como dice el DNU”. La normativa estableció que, hasta el 30 de septiembre, no podrá haber aumentos en los alquileres, se habilitó al no pago de los mismos en caso de no contar con un medio electrónico para hacerlo, la renovación automática del contrato (el inquilino puede rescindirlo una vez que estén habilitadas las mudanzas) y la suspensión de desalojos.

Según el titular de la CIA, no tuvieron “casos que hayan tomado el DNU hasta septiembre pero sí tenemos atrasos”, respecto al pago de la mensualidad por los inmuebles. Por eso, aseguró que “hay que ver cómo evoluciona con las aperturas administradas”. Sin embargo, más allá de la apertura de las inmobiliarias, si el inquilino define no pagar hasta octubre porque no le habilitaron un CBU u otro medio de pago electrónico, puede acogerse al decreto de necesidad y urgencia y abonar, retroactivo, después del 30 de septiembre. O sea, no “se pisan” el funcionamiento de las oficinas con la normativa del Ejecutivo nacional.

Bennazar aseguró que el sector inmobiliario evolucionó “de una forma tremenda para mutar al trabajo digital, un delivery inmobiliario que fue extraordinario, pero si a eso no le sumás ventas, que no podíamos alquilar o mudar, no había ingresos para las inmobiliarias”. Por eso, analizó que “la actividad está muy golpeada. Hace 24 meses veníamos en caída libre en ventas, entre febrero y mayo siempre se genera una expectativa leve pero nunca hubiésemos pensado que nos iba a agarrar una pandemia que nos desactive trabajar en la oficina”.

Para saber cómo evolucionará la situación del sector, aseguró a El Destape que “tenés casi 60 días sin ingresos y el que no tuvo ahorros está pagando las consecuencias” por eso serán necesarios entre “60 o 90 días de una actividad que tenga cierta sensación de ordenamiento – contemplando la normailización de variables como dólar, inflacion, actividad productiva – para que a fin de año o principios del año que viene la actividad puede empezar a repuntar”. Advirtió que la secuela del aislamiento recién la van a notar en junio y julio y la mejora de la situación, si hay hasta nueve meses de actividad estable, podrá darse entre febrero y marzo de 2021.

Finalmente, aseguró que sólo en la Ciudad de Buenos Aires hay 20 mil familias que trabajan de esta actividad – 7.000 matriculados más sus empleados – y que también dinamizan otros 106 rubros, como puede ser mueblería, bazar, electrodomésticos y todo lo que se adquiere a la hora de una mudanza.