Melconián: "Para tranquilidad de ustedes, tengo mucho diálogo con el Presidente"

"Para tranquilidad de ustedes, yo tengo mucho diálogo con el Presidente en privado. El presidente está (hecho) un crack", dijo el titular del Banco Nación, Carlos Melconian, antes de terminar los primeros dos minutos de una exposición que duró casi tres cuartos de hora.

Fue una frase precisa, colocada apenas después del saludo y del anticipo a vuelo de pájaro de lo que contaría luego: un análisis económico del mundo, de la Argentina y del rol de la entidad que encabeza. Ante él tenía a unos doscientos dueños de inmobiliarias y constructores. Todos querían olfatear algo más del segundo semestre y él buscó dejar en claro que cuenta con el respaldo de Mauricio Macri en la interna que lo enfrenta con el jefe del Banco Central, Federico Sturzenegger.

Aunque no lo nombró, golpeó sobre Stuzenegger desde el inicio. "Todo lo que venga en materia crediticia va a estar ligado a la macroeconomía. Milagros no se pueden hacer", dijo Melconian en una frase que contenía malicia. La macroeconomía es parte del "problema que arrastra argentina hace cincuenta años: la inflación" y un crédito hipotecario atado a ese fenómeno económico no puede sostenerse en el tiempo. Eso es lo que dijo Melconian sin decirlo abiertamente y cuestionando -en los hechos- la creación de Sturzenegger: los créditos hipotecarios en Unidades de Vivienda (UVIs), que se ajustan por inflación y se ofrecen en el Banco Ciudad.

"No he venido a hacer política ni propaganda pero está impecable en términos de las directivas que da. Y esta es una directiva del Presidente"; completó Melconian ante el público, que había sido convocado por Mercado Libre al Faena Art Center, en Puerto Madero, para hablar sobre el futuro del mercado inmobiliario y presentar su nueva categoría Inmuebles. Allí desplegó todas sus artes de orador, que parecen tomadas del stand up: combinó datos duros con algunas puteadas, palabras en inglés y esas eses que se come con cuidado.

Después abordó la situación del mundo y detalló que "viene creciendo menos" en términos generales y advirtió sobre las tensiones que cruzan a Brasil. "Es un tema para Argentina porque cuando Brasil crece Argentina crece, pero cuando Brasil cae Argentina cae. Más vale que les vaya bien a ellos porque una sola vez en veintocho años yéndole mal a ellos a nosotros nos fue bien", agregó.

También dedicó unos minutos a hablar de la necesidad de tener más depósitos en el sistema financiero para ampliar el financiamiento y explicó que la baja cantidad de depósitos tiene que ver con el "maltrato" que sufrieron los ahorristas a lo largo de la historia. "No por turros que se rajan, sino por maltrato al ahorrista", dijo Melconian y explicó que "sale caro" tener el dinero en el exterior.

Pero la preocupación principal -como advirtieron algunos emprendedores inmobiliarios- se le fue colando en su presentación: "Hay una manera de mirar (el país) que es como la 'herencia de Cristina' y hay otra manera de mirarlo que es 'la herencia de cincuenta años de Argentina'. Me sentiría feliz si, al final de este gobierno de cuatro años o de ocho años, como le digo al Presidente, pusimos la piedra basal de arreglar los seis quilombos (principales)", dijo y volvió a destacar su vínculo con Macri, con quien tiene un vínculo que viene desde los ochenta, cuando participó del proceso de estatización de deuda del Grupo Macri.

Planteó los problemas del valor del dólar, la necesidad de tener equilibrio fiscal, la inflación, la exportación de materias primas como eje de la economía argentina y elevar la tasa de inversión. Destacó el cambio de rumbo en materia de política exterior y el acercamiento a la Alianza del Pacífico pero mostró sus diferencias: "Pertenezco a un gobierno que pone el UVI. No creo en el UVI. Le dije al Presidente, creo en otra cosa y lo implementé en el banco. Es la libertad de elegir. No me peleo con nadie".

"Para aquellos que nos hemos hecho de abajo y, como me enseñaba mi vieja: 'Nunca esperes del Estado nada'. Vos te levantás a la mañana y ves dónde estás vos. No es egoísmo es no perder tiempo en estas cosas", completó Melconian y luego se metió de lleno en la gestión del Nación, donde renovó la línea de crédito hipotecario ajustado por coeficiente de variación salarial, que venía de la administración anterior y, al igual que esa herencia recibida, mantuvo la tasa fija al 14 por ciento por los primeros tres años.

Sobre esa base aclaró: "Hasta cuando me echen tengo el respaldo absoluto del Presidente. Las directivas del Presidente son: es un banco público y va a seguir así, no me pierda guita y quiero un banco del Estado profesional". Y, para machacar sobre esa idea, dijo que para llevar adelante su tarea

es "imprescindible contar con el respaldo presidencial".

"Vos no vales un choto si el Presidente no te apoya. Así que no me la creo", completó Melconian y antes de terminar volvió a torpedear los créditos indexados por inflación y los comparó con los que ofrece el Banco Nación: "El promedio de pedidos de créditos hipotecarios es por un millón de pesos y yo creo en esto. Porque si lo atás a la inflación, tengo que ir el sábado a Valentín Alsina -donde se crió-, a decirle a los pibes del fútbol, que si te llevás un palo a fin de año debés un palo cuatrocientos".