En una charla con el programa "Seguí con Rebecca", de Radio Mitre de dicha provincia, Barreiro acusó también a distintos testigos del juicio que se lleva a cabo en Córdoba de haber colaborado con la persecución sistemática ocurrida en la última dictadura: "Hay un grupo de personas que han trabajado activamente con nosotros y estuvieron a sueldo. Fue una resolución del comando del III Cuerpo del Ejército, donde se plantea que la única forma de derrotar la subversión es con colaboradores".
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Además, Barrerio los consideró "pieza clave" en el accionar del Ejército ya que "sin ellos, se hubiera hecho cosas con la gente que no habrían tenido ningún sentido" y dijo que en el centro clandestino de detención (al que pidió llamar "lugar de reunión de detenidos") "no murió nadie" y que en toda la provincia "no hay niños apropiados".
Consultado por qué hablaba, respondió que "tengo obligación de que no haya monopolio en el juicio de la historia de los '70. ¿No le llama la atención que todas las personas que han comentado (asesinatos y torturas) no quieren que se sepa la verdad? Hay grandes intereses económicos detrás de esto. Los negocios de los derechos humanos son inconmensurables hoy en día".