En el marco de la crisis política que pone en jaque a la economía norteamericana, el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, acusó a la oposición republicana de actuar de forma "irresponsable" y "peligrosa" al negarse a elevar el techo de la deuda. Además, reconoció que sin la cooperación de la oposición, Estados Unidos puede entrar en default.
La declaración ocurrió durante un acto en la Casa Blanca en el que no pudo confirmar que EEUU alcanzará su techo de deuda: "No, no puedo. Eso depende de Mitch McConell" (líder republicano en el Senado). El jefe de Estado advirtió que "no quiere creer que ese será el resultado, porque las consecuencias serían demasiado graves" y añadió: "Incumplir nuestras obligaciones de deuda sería una herida autoinfligida que arrastraría nuestra economía a un precipicio".
Por qué Estados Unidos puede entrar en default
El Departamento del Tesoro de Estados Unidos afirmó que si no se suspende o eleva el techo de endeudamiento antes del 18 de octubre de 2021, el país podría incurrir en suspensión de pagos de su deuda soberana sin precedentes. Sin embargo, los líderes del Partido Republicano se oponen a suspender el techo de deuda y los demócratas necesitan diez votos para aprobar la medida en el Senado.
"Están amenazando con usar su poder para evitar que hagamos nuestro trabajo que es salvar a la economía de un acontecimiento catastrófico. Creo que es francamente hipócrita, peligroso y lamentable", sentenció Biden. Y agregó: "Tienen que dejar de jugar a la ruleta rusa con la economía estadounidense".
El mandatario alertó de que una suspensión de pagos "amenazaría el estatus del dólar como la divisa de reserva de la que depende el mundo" además de aumentar los "tipos de interés de las hipotecas, créditos para automóviles o tarjetas de crédito". Por último comunicó que seguirá en contacto con McConnell y continuará en negociaciones para aprobar esta misma semana una medida que suspenda el techo de la deuda.
Previo a las declaraciones de Biden, Mitch McConell aseguró que Biden debería presionar a los líderes demócratas en el Congreso para que sigan adelante y aumenten el límite de deuda por su cuenta porque el Partido Republicano no cooperará. Los expertos en presupuesto dicen que ese proceso tardaría al menos dos semanas en completarse.
Límite de deuda
Esta situación sobre el techo de deuda se produce porque el Gobierno gasta mucho más dinero del que obtiene a través de impuestos federales. Solo en 2021, se estima que el Gobierno incurrirá en unos gastos de 5,8 billones y tendrá 3,5 billones de ingresos, lo que dejará un déficit de 2,3 billones, de acuerdo con la Oficina de Presupuesto del Congreso.
El Gobierno solo puede emitir deuda hasta el límite establecido por el Congreso, que tiene el poder de elevar ese techo según crea conveniente. Los legisladores negociaron el aumento del límite de la deuda durante décadas. Pero la voluntad de llevar a la mayor economía del mundo al borde del abismo se remonta a 2011, cuando los republicanos se propusieron frenar el gasto de los demócratas y utilizaron el límite para conseguirlo.
“La mayoría de los dirigentes (republicanos) consideran que el enfrentamiento sobre el límite de la deuda de 2011 fue, en última instancia, un éxito, ya que pudieron obligar (al entonces presidente Barack Obama) a firmar lo que fue el mayor proyecto de ley de recorte del gasto en décadas sin que se produjera un impago”, expresó Brian Riedl, quien entonces era economista jefe del senador republicano Rob Portman. El acuerdo que cerraron estaba destinado a reducir el gasto del gobierno en el transcurso de los años, pero la dinámica fue inversa.