(Por enviado especial)
Suspiros por Trudeau en atuendos típicos indonesios y rechazo de los árabes a usarlos
Los líderes del G20 vistieron hoy unas tradicionales camisas indonesias batik, al participar de la cena de bienvenida que tuvo lugar en el parque Garuda Wisnu Kencana, en Bali, dedicado al dios Vishnu.
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Los únicos que no aceptaron la propuesta fueron los dirigentes árabes, incluyendo el príncipe heredero y primer ministro de Arabia Saudita, Mohamed bin Salman, que no abandonaron sus túnicas.
La aparición del primer ministro de Canadá, Justin Trudeau, fue la que más miradas y suspiros generó en el centro de prensa, al utilizar las coloridas prendas adornadas con motivos florales con el botón de arriba desabrochado.
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Un restaurante que además es un acuario en el hotel donde se reunieron los líderes
El hotel The Apurva Kempinski, donde comenzó hoy oficialmente la cumbre de líderes políticos del G20, cuenta con un restaurante muy particular. Al Koral se accede bajando una escalera y allí hay acuario, con varias mesas pegadas a los paneles de cristal en los que se pueden ver peces de distintas especies, desde rayas hasta tiburones.
Se trata de un restaurante exclusivo que requiere un pago de 500.000 rupias indonesias (unos 32 dólares) para confirmar la reserva y tiene un monto mínimo que los comensales deben gastar, que en el caso de los adultos alcanza las 950.000 rupias indonesias (61 dólares).
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El enviado de Putin participó de la cumbre tras la información de su hospitalización
El ministro ruso de Relaciones Exteriores, Serguei Lavrov, ingresó caminando a la recepción de la cumbre del G20 en Indonesia y participó de todas las actividades, en medio de la información que había sido hospitalizado al llegar ayer a Bali por un problema cardíaco y que el Kremlin negó.
De acuerdo a lo publicado ayer por medios como la agencia de noticias AP, el jefe de la delegación de Rusia ante la ausencia del presidente Vladimir Putin, tuvo que ser internado ni bien llegó al país del sudeste asiático.
Un vocero de la cartera sanitaria local dijo que el funcionario "está en buen estado de salud" y que fue a un hospital "solo para hacerse controles".
Aunque la portavoz de la diplomacia rusa, Maria Zajarova, dijo que las informaciones sobre la internación eran "mentiras del más alto nivel".
Con información de Télam