Una de las claves para mantener un estado físico óptimo es llevar una alimentación saludable. Dentro de los alimentos recomendados, encontramos los frutos secos, que son una excelente fuente de nutrientes y proteínas. Uno de ellos son los anacardos, que, aunque no son los más populares, poseen numerosas propiedades beneficiosas para el organismo.
Los anacardos son ideales para aquellos que quieren mantener un peso saludable, reducir el colesterol y combatir el dolor en las articulaciones. A pesar de tener un alto contenido calórico, si se consumen en porciones adecuadas, ayudan a controlar el apetito y proporcionan una sensación de saciedad.
Una curiosidad poco conocida sobre los frutos secos en general es su alto contenido de cobre. Este mineral es fundamental para la producción de colágeno, una proteína responsable de la elasticidad y firmeza de la piel. Así que, en lugar de invertir en cremas costosas, incorporar frutos secos a nuestra dieta nos proveerá de colágeno de forma natural.
Es importante mencionar que antes de consumir los frutos secos, es recomendable activarlos. ¿Y a qué nos referimos con "activarlos"? Debemos remojarlos en agua durante varias horas para eliminar toxinas nocivas y potenciar los nutrientes presentes en estos alimentos.
Los anacardos son una excelente opción para mantener nuestro bienestar físico. Además de ser deliciosos, nos brindan una gran cantidad de nutrientes y beneficios para nuestro cuerpo. Su nombre se lo dio el monje y naturalista francés André Thevet, a quien su forma le recordó la de un corazón invertido (“ana” significa “hacia arriba” y “cardium”, “corazón”).
Su delicado sabor, muy particular, y su textura melosa los hace muy diferentes a otros frutos secos, especialmente cuando se cocinan. Tienen una gran afinidad con especias como la pimienta o el cardamomo y con otros ingredientes como el coco o el jengibre.
Propiedades de los anacardos
- Baja el colesterol y los triglicéridos: su perfil de grasas es óptimo para controlar el colesterol y los triglicéridos, lo que disminuye el riesgo de sufrir trastornos cardiacos. El efecto de su fibra y antioxidantes lo reducen aún más.
- Fortalece los huesos y mantiene los músculos en forma: fuente abundante de magnesio, mineral que forma parte de los huesos y, mediante un mecanismo de equilibrio con el calcio, contribuye a la relajación y el buen estado del sistema nervioso y de los músculos. El magnesio es tan necesario para la fortaleza de los huesos como el calcio.
- Regulador de sueño: contienen grandes cantidades de triptófano, el aminoácido precursor de la síntesis de serotonina, un neurotransmisor que se asocia con la sensación de bienestar.
- Ayudan a la formación de glóbulos rojos.
- Refuerzan nuestro sistema inmunitario.
- Contienen materia prima para construir células y hormonas.
- Sus nutrientes contribuyen al funcionamiento normal de músculos, nervios y del corazón.
- ¿Es afrodisíaco? En regiones de Brasil y Centroamérica, el anacardo tiene fama de afrodisíaco, algo que se dice de muchos alimentos, sobre todo si poseen formas llamativas, pero que en su caso pudiera estar justificado por la abundancia de cinc, un mineral necesario para la síntesis de hormonas sexuales masculinas.