La PROmiscuidad judicial: las relaciones estrechas del macrismo con Comodoro Py

Las estrechas relaciones de Mauricio Macri y exfuncionarios suyos con quienes deben resolver distintas causas que involucran a CFK son explícitas. Las fotografías que muestran al fiscal Diego Luciani, que acusa a Cristina Kirchner en el juicio de Vialidad, jugando al fútbol en la quinta Los Abrojos, de Macri, junto al juez Rodrigo Giménez Uriburu, quien es el que debe juzgar a CFK en ese mismo debate, son una prueba más de la promiscua relación que mantiene el macrismo con Comodoro Py.

Un breve repaso de estas relaciones cercanas arroja que:

• El juez Gimenez Uriburu que juzga a Cristina Kirchner en el juicio de Vialidad juega al fútbol en la quinta de Mauricio Macri con el fiscal Diego Luciani, que la acusa.
   
• El camarista de Casación, Mariano Borinsky, practicaba paddle y tenis con el entonces presidente en la residencia de Olivos a la par que ratifica procesamientos contra CFK y otros dirigentes kirchneristas. Es uno de los jueces que revisará lo que resuelva el TOF 2 en el juicio de Vialidad.
   
• Otro camarista de la Casación, Daniel Petrone, designado por Macri, se excusa de intervenir en el caso D’Alessio por su “íntima amistad” con elexministro de Justicia Germán Garavano. Pero continúa interviniendo en la revisión del caso Memorándum y Hotesur-Los Sauces y en el caso Cuadernos.
   
• El juez Carlos Mahiques es padre de un funcionario macrista que fue clave en la persecución y dejó de ser ministro de la entonces gobernadora María Eugenia Vidal para acceder a la Cámara Federal de Casación, donde fue puesto a dedo por Macri.
   
• El ministro de la Corte Suprema, Carlos Rosenkrantz, que firma fallos que perjudican a Cristina, confirmó públicamente que es amigo de Fabián "Pepín" Rodríguez Simón, el exasesor de Macri que está prófugo.
   
• Magistrados y fiscales federales de peso en Comodoro Py, como los camaristas Gustavo Hornos y Mariano Llorens, o el fiscal Raúl Plee, que tienen expedientes que involucran a la vicepresidenta, visitaron sin una razón institucional a Macri en la Quinta de Olivos y la Casa Rosada.
   
• El hijo del fiscal procesado por espionaje ilegal, Carlos Stornelli, fiscal que acusó a Cristina en la causa de los Cuadernos, formó parte de la AFI que comandó el escribano Gustavo Arribas, íntimo amigo del entonces jefe de Estado.

Y la lista podría continuar. La promiscuidad del macrismo con Comodoro Py (salvo Rosenkrantz, todos los nombrados tienen despacho en el edificio de Retiro) es explícita.     

“Esto colapsó. Tiene que ser reestablecido el gobierno y el control, y los impresentables separados del servicio”, señala un magistrado consultado para esta nota.

Fútbol en la quinta de Macri

El fiscal Luciani y el juez Giménez Uriburu integran el equipo de fútbol Liverpool donde además ataja el camarista porteño Mariano Llorens, quien blindó a Macri en diversas causas de espionaje (es uno de los hacedores de la tesis del cuentapropismo de los espías) y apunta contra CFK en el caso Ruta del dinero K. Al menos, Luciani y Gimenez Uriburu durante el gobierno de Cambiemos jugaron al fútbol en la quinta de Macri. Cristina se hizo eco del escándalo apenas fue publicado por Pagina12 y tuiteó: “De Liverpool salió una de las bandas más importantes de la historia del rock. Del Liverpool de Los Abrojos salió la banda de Macri”.

Tras la publicación de las fotografías, CFK recusó al fiscal y al juez en el caso de la Obra Pública Vial. Este viernes, Luciani hizo su descargo, pidió se rechace el pedido de apartamiento y ratificó su amistad con Gimenez Uriburu. Dijo que hay un ataque en su contra. La decisión de apartarlos (o no) está en manos del tribunal federal 2 a cargo del juicio –y que integra Rodríguez Uriburu-. El mismo viernes, el abogado defensor de Cristina, Carlos Beraldi, también dijo que recusará al juez Jorge Gorini -presidente del TOF 2- por reunirse con la entonces ministra de Seguridad Patricia Bullrich cuando ya se había iniciado esta causa y ella era denunciante.

Visitas, paddle y tenis con Macri en Olivos

Las fotos “futboleras” no hacen más que confirmar los estrechos vínculos del macrismo con quienes deben juzgar a Cristina. A continuación otros casos escandalosos:

• Los jueces de la Cámara Federal de Casación Penal, Mariano Borinsky y Gustavo Hornos, visitaron a Macri en diversas ocasiones en la Quinta de Olivos y la Casa Rosada, tal como reveló El Destape. Borinsky, entre otras excusas, esgrimió ante la consulta de este medio que iba a jugar al paddle y al tenis. El propio Macri confirmó los encuentros en una entrevista con TN.

Borinsky estuvo al menos 16 veces en Olivos y Hornos otras 2. Además, el segundo también ingresó 7 veces a la Casa Rosada. Las reuniones con Macri se dieron en fechas coincidentes con fallos clave contra la ex presidenta como los casos de Obra Pública, Dólar Futuro, la Ruta del dinero K y la denuncia de Nisman, entre otras.

Tanto Hornos como Borinsky fueron denunciados penalmente junto al expresidente por esos ingresos pero los tres fueron favorecidos por sus colegas de Comodoro Py y lograron el sobreseimiento, en lo que fue una resolución escandalosa. El caso se cerró sin investigar, tal como lo remarcó la fiscal del caso, Alejandra Mangano. Solo quedan abiertos aún los expedientes que se iniciaron contra Hornos y Borinsky en el Consejo de la Magistratura. 

Hornos y Borinsky integran la sala IV de Casación, que es la que revisará lo que resuelva el Tribunal Oral Federal Nº 2 en el juicio de la Obra Pública Vial. Es decir, junto al juez Javier Carbajo –designado por Macri- son quienes ratificarán o rectificarán lo que se resuelva en el juicio.

• El fiscal ante la Cámara de Casación, Raúl Pleé, también estuvo en la Quinta de Olivos con Macri y el jefe de la AFI, Gustavo Arribas.

Tal como publicó este medio, los tres se reunieron en la quinta de Olivos el 23 de marzo de 2018. Pleé es uno de los hombres más poderosos de Comodoro Py e intervino en causas clave como la denuncia del fiscal Alberto Nisman, la causa Dólar Futuro, el caso de las Fotocopias de los Cuadernos, el desguace del Grupo Indalo y diversas investigaciones sobre el espionaje ilegal macrista. Tuvo un papel central para que una megacausa de espionaje que se investigaba en los tribunales de Lomas de Zamora y complicaba a Macri pasase al edificio de Retiro.

Ante una interpelación del Congreso para que explique su irregular presencia en la Quinta de Olivos, Pleé dijo que Macri lo citó para darle explicaciones sobre su candidatura a la Procuración. El procurador interino Eduardo Casal –que responde a los intereses del macrismo- cerró la investigación interna que se había abierto.

• El mentado camarista porteño Mariano Llorens fue otro de los visitantes de Macri en Olivos y la Casa Rosada. Es el mismo juez que ataja en el equipo del fiscal Luciani y el magistrado Giménez Uriburu.

Llorens fue designado por Macri en 2018. Es una pieza clave de Comodoro Py. Actualmente, es presidente de la Cámara Federal porteña. Tal como publicó El Destape, los documentos públicos a los accedió este medio dan cuenta de que:

1. Llorens ingresó a la Casa Rosada el 17 de diciembre de 2018. Entró a las 14.07 al despacho de Asesores. Allí atendían entre otros José Torello y el actual prófugo Fabián “Pepín” Rodríguez Simón, dos miembros de la Mesa Judicial macrista. Pero además a la misma hora y al mismo lugar ingresó Juan Bautista Mahiques, la punta de lanza de las operaciones judiciales de Macri, que fue cobijado por Horacio Rodríguez Larreta como jefe de los fiscales porteños.
    
2. También entró a la quinta de Olivos el 6 de septiembre de 2019. En la planilla figura que fue a ver a Macri, que ingresó a las 16.45 y se retiró 15 minutos después. De acuerdo a la documentación oficial, llegó en el auto con Pierre Pejacsevich, un ex gerente del Banco Macro que tiene una consultora financiera y es compañero de partidas de bridge de Macri.

Por las explicaciones que dio en una recusación para justificar su visita a Olivos Llorens fue denunciado penalmente. Esa causa fue archivada recientemente.

Llorens además de atajar en el equipo Liverpool es coautor de la doctrina del cuentapropismo con la que se benefició al líder del PRO en una megacausa de espionaje ilegal, firmó el sobreseimiento de Macri por la inteligencia ilegal a los familiares del ARA San Juan y, recientemente, en el marco del caso Ruta del dinero K, ordenó que se reúnan las causas contra la vicepresidenta para que se investiguen de forma “conglobada”.   

La “íntima amistad” de jueces con funcionarios

Otros ejemplos del vínculo que mantiene el macrismo con jueces que tienen despacho en el edificio de Retiro son los camaristas de Casación Carlos Mahiques y Daniel Petrone –ambos designados por Macri- y el fiscal Carlos Stornelli. También los puestos a dedos por el expresidente en la cámara porteña, Leopoldo Bruglia y Pablo Bertuzzi. Otro caso emblemático es el del vicepresidente cortesano Carlos Rosenkrantz.

• El juez Daniel Petrone integra la sala I de la Cámara de Casación y se excusó de intervenir en el caso D’Alessio por su “íntima amistad” con el exministro de Justicia Germán Garavano. Desde la sala I Petrone debe revisar los casos Memorándum con Irán y Hotesur-Los Sauces e interviene en el de las Fotocopias de los cuadernos. Desde aquella misma sala firmó junto a Ana Figueroa y Diego Barroetaeña el sobreseimiento de CFK en el caso Dólar Futuro.

El 8 de septiembre del 2020, los camaristas Guillermo Yacobucci y Carlos Mahiques aceptaron que su colega Daniel Petrone se excusara de intervenir en el D’Alessiogate. “Que resultan atendibles los motivos alegados por el Dr. Petrone, que justifican el apartamiento solicitado atento a las razones de amistad íntima invocadas. Corresponde, en consecuencia, aceptar la excusación del magistrado de mención en estas actuaciones”, sostuvieron. La amistad íntima era con Garavano.

• Carlos Mahiques llegó a la Cámara Federal de Casación a dedo tras ejercer como ministro de Vidal en la provincia de Buenos Aires. Es padre de Juan Bautista Mahiques, uno de los impulsores de la persecución durante el macrismo. Juan Bautista era el representante del Ejecutivo en el Consejo de la Magistratura. Actualmente, Juan Bautista es Fiscal General porteño.

Carlos Mahiques también fue nombrado por Macri en la justicia federal y puesto a dedo: fue trasladado durante la gestión cambiemita desde la Casación ordinaria a la federal sin haber concursado para el nuevo cargo. Luego logró que el Senado aprobara su pliego y así reacomodó (solo cosméticamente) la forma irregular en que fue designado.

• Uno de los hijos del fiscal procesado Carlos Stornelli trabajó unos meses en la AFI que comandó el escribano Gustavo Arribas, amigo de Macri, tal como publicó este medio.

Se trata de Julián Stornelli, quien dejó el cargo el 29 de julio de 2016. Era personal contratado (no pasante) y estuvo alrededor de tres meses en la agencia de inteligencia macrissta.

• La esposa del juez federal Julián Ercolini, uno de los jueces del Lawfare, trabajó junto a Garavano. Se trata de Julia Kenny, quien ahora trabaja en el área de Comunicación del Ministerio Público Fiscal, bajo las órdenes del procurador interino Eduardo Casal.

Las relaciones personales entre referentes del macrismo y la Justicia llegan a la Corte.

• El vicepresidente de la Corte, Carlos Rosenkrantz, afirmó que mantiene una amistad de años con el exasesor de Macri, Pepín Rodríguez Simón, actualmente prófugo de la Justicia.

"Con Rodríguez Simón me une una amistad de muchísimos años " y “también con (Mario) Quintana”, dijo Rosenkkrantz en diálogo con TN en septiembre de 2021.

Rosenkrantz se refirió a su amistad con el operador macrista en una declaración testimonial que prestó en la causa en que se investigan las extorsiones del gobierno de Macri al Grupo Indalo. Es la investigación que provocó la fuga de Pepín y que complica al exjefe de Estado. Luego de presentar un escrito con su testimonial, el supremo concurrió a TN. 

El ministro cortesano había sido convocado por la jueza María Romilda Servini porque mantuvo 59 llamadas con Rodíguez Simón en el período que investiga la Justicia. También hay otras 38 llamadas del asesor de Macri con Gabriel Bouzat, socio de Rosenkrantz.

Rosenkrantz al igual que Horacio Rosatti fue designado por Macri en la Corte Suprema. Apenas asumió, el 14 de diciembre de 2015, Macri los nombró en comisión, por decreto Esa idea, contó el expresidente, se la había acercado Pepín. Fue tal escándalo que el macrismo dio marcha atrás con esa modalidad de nombramiento. Unos meses más tarde, a mediados de 2016, el macrismo logró los dos tercios de los votos en el Senado para poder sentar a Rosenkrantz y Rosatti en el Alto Tribunal. Hoy ambos votan de acuerdo a los intereses de Cambiemos.

Esta red de relaciones podría explicar los resultados que se vendrán en materia judicial de cara al año electoral.

La reacción

¿Es posible para el oficialismo modificar este escenario? La relación de fuerzas indica que es muy difícil que algo cambie en el corto plazo. No es azaroso que hayan naufragado todos los proyectos de reforma judicial que el gobierno envió al Congreso.

El Consejo de la Magistratura y la Comisión Bicameral Permanente de Seguimiento y Control del Ministerio Público Fiscal, que desde tribunales señalan como dos organismos desde donde se pueden instrumentar ciertos cambios, están paralizados u obstaculizados. Por ejemplo: tras el recambio legislativo, la bicameral de control del MPF no pudo volver a conformarse por falta de acuerdo. El Consejo de la Magistratura –donde se sanciona a los jueces- fue tomado por asalto por la Corte, que asumió su presidencia y alejó al oficialismo de reunir una mayoría que le permita avanzar con sus iniciativas.

Tras la revelación de las fotos de Luciani y Giménez Uriburu jugando al fútbol en la quinta de Macri, el oficialismo no descarta presentar una denuncia penal. Se trata de una maniobra que busca exponer las relaciones que se volvieron a hacer evidentes (este viernes, sin ir más lejos, al responder sobre su recusación en el juicio de Vialidad, Luciani confirmó que mantiene una relación de afecto con el juez). El futuro de la denuncia que se podría presentar parece sellado: son los mismos jueces de Comodoro Py los que deberán resolver la suerte de sus colegas. Cada vez que se investigaron a sí mismos, los jueces federales porteños eligieron el corporativisimo y cerraron los expedientes.