Piden procesar a Gustavo Arribas y Silvia Majdalani por supuesto espionaje ilegal sobre el domicilio de la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner y el Instituto Patria en 2018.
Los fiscales Cecilia Incardona y Santiago Eyherabide solicitaron hoy el procesamiento de los ex jefes de la Agencia Federal de Inteligencia (AFI) durante el gobierno de Cambiemos que presidió Mauricio Macri, según informó Télam.
Los representantes del Ministerio Público Fiscal, que tienen delegada la investigación, presentaron el dictamen ante el juez federal Juan Pablo Auge, que en los próximos días deberá resolver la situación procesal de los acusados.
Los fiscales también reclamaron que sea procesado el agente y ex director operacional de Contrainteligencia, Martín Coste, en el marco del expediente por el cual ya se encuentra procesado el ex espía Alan Ruiz, sindicado como quien coordinaba los operativos ilegales.
Para los investigadores, los acusados violaron la ley de inteligencia al ordenar y realizar tareas de espionaje ilegal, pero además cometieron el delito de falsedad ideológica cuando intentaron ocultar las maniobras a través de la producción de documentos falsos, con el objetivo de darle apariencia de legalidad a su accionar.
En un extenso dictamen del que aún no trascendieron detalles, los fiscales sostuvieron que los documentos -tanto los producidos para los circuitos internos de la AFI, como los enviados al Congreso y a la justicia- fueron parte del intento de ocultar el espionaje ilegal.
Según pudo saber esta agencia, de acuerdo con la investigación, la orden de realizar tareas de espionaje, que Ruiz trasladó al grupo de espías que operaba en la "calle", apuntaba a vigilar e informar si en ambos domicilios ingresaban o salían "bolsos", y no a advertir riesgos ante un eventual ataque terrorista, como se intentó decir en un primer momento. Fuentes judiciales dijeron que, según la investigación, esa orden llegaba directamente de Silvia Majdalani.
Las tareas de espionaje ilegal “consistían en llevar a cabo vigilancias, observaciones, obtener información, producir inteligencia, almacenar datos y generar informes sobre distintas personas, por el solo hecho de su pertenencia político partidaria, social, sindical y/o cultural”, según surge del expediente.
La “vigilancia” se hacía de día, desde un auto ubicado en las inmediaciones de los blancos a espiar –uno de ellos detectado el 6 de agosto de 2018 por personas que frecuentaban el Instituto Patria- desde donde los espías podían verlo todo.
Esta investigación se inició por una denuncia presentada por la interventora de la AFI, Cristina Caamaño, quien entre otros elementos relató que ese organismo, durante la gestión Cambiemos adquirió el Earthwatch, un software basado en fotografías de alta definición que se toman desde un satélite y que pudo haber sido utilizado para fines ilegales.