Luego de un año donde el gobierno de Javier Milei recortó las transferencias hacia las provincias en torno al 80% comparado con la ejecución presupuestaria de 2023, el gobernador de Córdoba, Martín Llaryora, cargó contra el Presidente al asegurar que el Ejecutivo nacional "optó por desentenderse de sus obligaciones en jubilaciones, salud, transporte y obras".
En su discurso en el inicio del período de sesiones ordinarias de la provincia, Llaryora apostó por una fuerte diferenciación en relación con la administración de La Libertad Avanza (LLA): "Pudimos sostener el superávit sin pasarles a los intendentes obligaciones, como hizo la Nación con las provincias”, apuntó el mandatario cordobés.
El escenario fue la ciudad de Deán Funes, localidad ubicada en el norte y que fue elegida para trasladar la Legislatura desde la ciudad de Córdoba. Allí, Llaryora enfatizó el reclamo por el incumplimiento de los envíos para cubrir el déficit de la Caja de Jubilaciones por parte de Nación. “Nunca me imaginé que el Gobierno nacional se iba a desentender tanto de Córdoba”, aseguró.
“Fui el gobernador que en medio de la crisis sostuvo el Boleto Educativo y, que frente al desfinanciamiento universitario, extendió el Boleto Educativo a los universitarios. Los jóvenes no son un Excel de ajuste; los jóvenes son el futuro. Mientras otros reducen el presupuesto universitario, nosotros construimos universidades en el interior”, dijo en ese sentido.
Luego, anunció un “plan de igualdad territorial” para el norte y el sur-sur de Córdoba. En ese sentido, el Gobernador afirmó que “el fin del superávit fiscal es ser una herramienta de promoción y crecimiento”. Según lo explicado, se va a utilizar el superávit “consolidado” para esa iniciativa, con “apuesta a la educación como motor de las personas”, con una fuerte inversión en infraestructura y en promoción industrial.
Llaryora apuntó contra los discursos de odio: "No condujo a nada"
En otro segmento de su discurso, el gobernador Llaryora se pronunció sobre la Marcha Federal Antifascista y Antirracista de este sábado, cuyo epicentro fue el Congreso de la Nación y que se replicó en localidades de todo el país.
“En la democracia tenemos que defender la libertad de opinión. Querer censurar a quien opina distinto es querer bajar la democracia que nos costó tantas vidas. No tenemos que tener miedo, tenemos que tener conciencia y responsabilidad histórica”, agregó, y pidió a la dirigencia “reaccionar frente al odio", ya que este "no condujo a nada”.
A su vez, dijo que es necesario "levantar la voz, porque el silencio es cómplice". "Nuestra responsabilidad es defender la democracia que costó muchas vidas. Como gobernador, voy a defender y dar garantías para que todos podamos vivir en una Córdoba libre. La libertad es poder opinar, la libertad no puede ser censurada”, insistió.
De esta manera, dejó en claro que "esto no es una cuestión de partidos, es una cuestión de bajar la tensión social y el odio. Desde el liderazgo, debe sostener las posturas de la unidad de los argentinos. Les pido que defendamos Córdoba todos los partidos. Somos Córdoba, donde la diversidad, el respeto y el pluralismo son base de nuestra cultura”, señaló con énfasis.
En la ciudad de Córdoba, la marcha fue encabezada por identidades trans, travestis, no binarias, identidades lésbicas y personas con VIH positivo; esto se decidió desde la organización “porque son los colectivos más vulnerados por las medidas de ajuste y el discurso presidencial”. Además, miles de personas se manifestaron en las ciudades de Cosquín, Villa María, Cruz del Eje, Alta Gracia, San Francisco y Río Cuarto.