Rousseff eliminó 8 ministerios y 30 secretarías en medio del ajuste

02 de octubre, 2015 | 12.21
La presidenta de Brasil, Dilma Rousseff, anunció este viernes la eliminación de ocho ministerios y la fusión de otras carteras, en una reforma que busca reducir el gasto público en medio de una crisis política y económica.

"Vamos a dar hoy un primer y gran paso para la reorganización de la administración pública federal. Estamos comenzando por reducir ocho ministerios", anunció la mandataria en un acto público en Brasilia.

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"Sabemos que existen dificultades que tienen que ser superadas para que la economía del país vuelva a crecer, pero para eso necesitamos estabilidad política y ese también es el propósito de esta reforma", sostuvo Rousseff.

La mandataria afirmó que con estas iniciativas busca "contribuir a que Brasil salga más rápidamente de la crisis, creciendo y generando empleo".

Con esta reforma, el Partido del Movimiento Democrático Brasileño (PMDB), principal aliado del gobernante Partido de los Trabajadores (PT), aumentará de seis a siete las carteras bajo su control.
En tanto, el PT perdió la titularidad de tres ministerios, que fueron fusionados con otras carteras.

La mandataria recortó un total de diez carteras, como había prometido en septiembre cuando presentó una serie de recortes de gastos estatales. No obstante, fueron creados otros dos ministerios, que resultan de la fusión de carteras extinguidas.

La reforma contempla también la eliminación de 30 secretarías y 3.000 cargos de confianza -los que otorgan los titulares o directores de organismos públicos sin mediar concurso-, la reducción del 10 por ciento de los salarios de los ministros y límites de gastos en las carteras.
El ahorro calculado por el gobierno a partir de la reforma es de 200 millones de reales (unos 50 millones de dólares) al año.

La salida de Mercadante, el asesor de mayor confianza de la mandataria, y su sustitución por el actual titular de Defensa, Jaques Wagner, un aliado del ex presidente Lula da Silva, responden a presiones realizadas por el propio Lula, el PT y el PMDB, cuyos representantes en el Congreso no tenían buena relación con el brazo derecho de Rousseff.

Mercadante volverá a dirigir el Ministerio de Educación, que ya comandó entre 2012 y 2014. Quien ocupaba esa cartera era el catedrático Renato Janine, quien fue destituido el miércoles. En tanto, en el lugar de Wagner al frente de Defensa quedará el ex diputado Aldo Rebelo, del Partido Comunista do Brasil (PCdoB).

El respaldo del PMDB es vital para Rousseff en el Congreso para que avancen las medidas de ajuste fiscal y para frenar un eventual pedido de apertura de juicio político en su contra que pueda derivar en su destitución.

El PT, a su vez, perdió tres carteras, una vez que la flamante cartera de Ciudadanía, que estará a cargo de Nilma Gómes, surge de la fusión de las secretarías, con estatus de ministerio, de Igualdad Racial, Derechos Humanos y Políticas para las Mujeres.

Miguel Rossetto, también vinculado al ex presidente Lula, dejará la Secretaría General de la Presidencia y dirigirá un ministerio que unifica las carteras de Previsión Social y Trabajo.