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Renzi tuvo dos encuentros con Macri en menos de un año. En febrero visitó la Argentina en busca de acuerdos comerciales. En octubre, fue el presidente argentino el que pisó tierras italianas por la canonización del cura Brochero y aprovechó para visitar a su "colega".
El premier italiano finalmente presentó su renuncia este lunes luego de perder, por casi 20 puntos, el referéndum para modificar la Constitución de su país. Renzi promovía darle más poder al puesto de primer ministro (o sea, a él) y pretendía encarar reformas en las leyes laborales. La campaña de los partidos anti-stablishment contra la reforma de Renzi terminó dándole una dura derrota que el político interpretó como una causa para abandonar el cargo que asumió hace 2 años.
Quien corrió la misma suerte fue el neocelandés John Key, que se reunió con Macri en febrero, en la ciudad de Washington. El ahora ex primer mandatario tenía agendada una visita a Argentina en noviembre, pero la canceló por un fuerte terremoto que ocurrió en el país oceánico.
Los motivos de la dimisión, según Key, recaen en cuestiones "familiares". "Es la decisión más difícil que he tomado en mi vida y no sé que pasará luego", dijo a la prensa. Según consignó el matutino español El Mundo, su esposa fue quien motorizó esta decisión, ya que le reclamó que deje el cargo por el nivel de intromisión en la vida privada que padecían sus dos hijos, Stephie y Max.
Estos casos se suman al de la candidata demócrata Hillary Clinton, que perdió las elecciones en Estados Unidos frente al republicano Donald Trump. El gobierno de Macri expresó en diversas ocasiones su preferencia por Clinton y su política de apertura comercial. Caso similar es de François Hollande, quien anunció recientemente que no se postulará a una reelección por su bajísimo nivel de aprobación popular. Hollande también visitó la Argentina en marzo, mostrando buena sintonía con el presidente argentino.
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