El número uno del tenis mundial, Novak Djokovic, ha declarado que tiene una asignatura pendiente en los Juegos Olímpicos y que buscará el oro en París 2024, añadiendo que está deseando volver a Australia pese a su expulsión de este año.
La ambición de Djokovic de conseguir un oro olímpico en Tokio terminó con una derrota en semifinales ante el alemán Alexander Zverev, empañando un 2021 por lo demás estelar en el que ganó los tres primeros Grand Slams y llegó a la final del cuarto.
Un día después de su derrota ante Zverev, cayó ante el español Pablo Carreño Busta en el partido por la medalla de bronce y volvió de Japón con las manos vacías.
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"Una medalla olímpica, especialmente el oro, es siempre un gran deseo", dijo el jugador de 34 años a la Radio Televisión de Serbia antes de su regreso a la competición la próxima semana.
"Desgraciadamente, no tuve la oportunidad de luchar por ella en el pasado. Pienso estar en París en 2024.
"Rebobiné muchas veces mi partido con Zverev en Tokio, tratando de averiguar qué había salido mal. Jugué magníficamente hasta ese momento, pero sentí que estaba agotado, tanto mental como físicamente".
El mes pasado, tras unos 11 días de montaña rusa que incluyeron dos cancelaciones de visado, dos impugnaciones ante los tribunales australianos y cinco noches en dos hoteles de detención de inmigrantes, Djokovic, que no estaba vacunado, fue deportado en la víspera del Abierto de Australia.
Esto lo privó de la oportunidad de ganar su décimo Abierto de Australia, un récord, y su vigésimo primer título de Grand Slam.
"Siempre recordaré todas las cosas bonitas que me han pasado en Melbourne", dijo. "A pesar de todo, tengo una gran conexión con Australia. Los resultados que he tenido en Melbourne en el pasado demuestran lo que siento cuando voy allí".
"Todo lo que ha ocurrido este año ha sido totalmente inesperado. Será difícil de olvidar, pero quiero volver a Australia en el futuro y jugar en la Rod Laver Arena de nuevo".
Djokovic dijo en una entrevista con la BBC esta semana que está dispuesto a perderse los Grand Slams y otros torneos con tal de no vacunarse contra el COVID-19, pero añadió que no es antivacunas y que tiene la "mente abierta" para el futuro.
Djokovic iniciará su temporada 2022 en el ATP 500 de Dubái la próxima semana.
Djokovic dijo a los periodistas en Dubái, donde los visitantes no están obligados a vacunarse, que ha echado de menos el tenis.
"Todo lo que ha ocurrido afectará a mi regreso en Dubai", dijo a la televisión estatal de Serbia. "Intentaré canalizar toda esta energía, convertirla en combustible tanto mental como físicamente. Hay una motivación extra, sin duda".
Con información de Reuters
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