Muchas veces, buscamos formas de reducir el consumo de energía eléctrica en nuestra casa sin tener que hacer cambios importantes para poder hacerle frente a los aumentos en las tarifas de luz. A continuación, te compartimos un truco simple y económico que puedes utilizar en tu heladera para ayudar a reducir su consumo. ¿Cómo? ¡Colocando un corcho en su interior!
Este truco puede sonar curioso, pero tiene una explicación científica. Resulta que los corchos, al ser un material natural y aislante, pueden actuar como barrera para la transferencia de calor en el interior de la heladera. Esto significa que la heladera no tiene que trabajar tanto para mantener la temperatura adecuada, lo que se traduce en un menor consumo de energía.
El corcho también previene la acumulación de humedad en las superficies internas de la heladera, ya que actúa como una barrera. Al reducir la condensación, el electrodoméstico puede mantener su rendimiento de manera más eficiente, sin necesidad de utilizar tanta energía para compensar la humedad interna.
Pero eso no es todo. El uso de corchos en la heladera también puede ayudar a prolongar la vida útil de los alimentos. Al mantener una temperatura estable, el corcho contribuye a que los alimentos se conserven mejor, evitando que se echen a perder rápidamente.
Pero lo mejor de todo es que esta solución no solo es beneficiosa para el medio ambiente, sino que también es económica y sostenible. Los corchos son un material ecológico y reutilizable, lo que significa que no solo estarás ahorrando energía, sino que también estarás contribuyendo a reducir tu impacto ambiental.
Claro está, el uso de corchos en la heladera no es una solución mágica que hará que tu consumo de energía se reduzca drásticamente, pero sí puede ofrecer pequeñas mejoras en la eficiencia energética y el mantenimiento del electrodoméstico. Además, es una opción fácil de implementar y que puede marcar la diferencia a largo plazo.
Estos son los electrodomésticos que tenés que desenchufar para ahorrar en la factura de luz
De acuerdo con los especialistas, existen varios electrodomésticos que son reconocidos por su alto consumo de energía eléctrica en los hogares. Una simple acción como desenchufarlos permite ahorrar en medio de la suba de tarifas de luz y además cuidar el ambiente.
Uno de los artefactos destacados en el listado es el aire acondicionado. Ya sea en modo frío o calor, es uno de los principales consumidores de electricidad en un hogar, especialmente si se utiliza de manera prolongada para climatizar el ambiente.
También rankean alto las estufas de cuarzo, muy comunes durante los meses de invierno, que representan un alto consumo energético debido a su uso constante para calentar el espacio. Lo mismo ocurre con el horno eléctrico, los secadores de ropa y las heladeras: todos generan un gasto considerable en la factura de luz debido a su función o tamaño.
En cuanto al horno eléctrico, cada vez más presente en los hogares, puede consumir una gran cantidad de energía debido a la intensidad requerida para cocinar o calentar alimentos. Del mismo modo, los secadores de ropa, especialmente aquellos que no son de condensación, pueden gastar una cantidad considerable de electricidad debido a la potencia que generan al ser utilizados.