Según un estudio realizado por la Universidad de Harvard y publicado en la revista JAMA Psychiatry, las mujeres que practican la gratitud viven más años y son más felices. Parece ser que dar pasos teniendo en la mente pensamientos positivos y agradecidos, lo que se conoce como la "caminata de la gratitud", tiene un impacto positivo en nuestra felicidad y salud.
Este hábito consiste en caminar y pensar conscientemente en cosas por las que estar agradecido. No solo ayuda a mejorar nuestro bienestar emocional, sino que también fomenta el optimismo, combate el estrés y nos permite disfrutar más del presente.
En otro estudio, a cargo de la Universidad de Buffalo en Estados Unidos, se monitoreó la actividad física de casi 6000 mujeres mayores de 63 años, llegando a la conclusión de que caminar alrededor de 3.600 pasos diarios reduce el riesgo de mortalidad. El ejercicio físico combinado con pensamientos agradecidos parece ser la clave para alcanzar la felicidad y la longevidad.
El experto en felicidad de la Universidad de Harvard, Arthur Brooks, aseguró que la gratitud es un hábito que puede generar un impacto significativo en nuestra vida. Así que la próxima vez que salgas a caminar, hacelo con una actitud de gratitud y verás cómo mejora tu bienestar emocional.
La doctora Ying Chen, del Programa de Prosperidad Humana en el Instituto de Ciencias Sociales Cuantitativas de la Universidad de Harvard en Cambridge, Massachusetts, y sus colegas examinaron la asociación entre la gratitud y la mortalidad por todas las causas específicas en la vida posterior.
El análisis incluyó datos de 49.275 enfermeras registradas mayores de los Estados Unidos (edad promedio, 79 años) que participaron en el Nurses’ Health Study (2016 a 2019). Los investigadores encontraron que una mayor gratitud al inicio del estudio se asoció con un menor riesgo de mortalidad. “La investigación previa indica que hay formas de fomentar intencionalmente la gratitud, como escribir o discutir sobre lo que uno está agradecido unas pocas veces a la semana”, dijo Chen en un comunicado.
Alerta: un estudio de Harvard reveló qué dos comidas aumentan el riesgo de enfermedades cardíacas
Un estudio realizado por la Universidad Harvard reveló cuáles son los dos alimentos que más aumentan el riesgo de sufrir enfermedades cardíacas. De acuerdo con los investigadores, consumirlos de manera frecuente puede tener graves consecuencias para el organismo, y en particular, para el corazón.
Es sabido que la salud del corazón está estrechamente relacionada con la alimentación y un estilo de vida saludable, además de otras condiciones, como la genética. En un reciente estudio, los investigadores descubrieron cuáles son los dos alimentos ultra procesados que deben evitarse para tener una buena salud cardiovascular.
Este estudio, realizado por Harvard en la Escuela Chan de Salud Pública y publicado en The Lancet, involucró a más de 200.000 profesionales de la salud, a quienes les dieron determinados alimentos y les hicieron un seguimiento para ver si desarrollaban enfermedades cardíacas o accidentes cerebrovasculares.
Estos alimentos ultra procesados que se incluyeron en el estudio fueron: pan y cereales; salsas, untables y condimentos; snacks y postres dulces envasados; aperitivos salados envasados; bebidas azucaradas; carnes rojas, aves y pescados procesados; platos listos para comer o calentar; postres a base de yogur/lácteos; licores fuertes y bebidas endulzadas artificialmente.
Este estudio, realizado por Harvard en la Escuela Chan de Salud Pública y publicado en The Lancet, involucró a más de 200.000 profesionales de la salud, a quienes les dieron determinados alimentos y les hicieron un seguimiento para ver si desarrollaban enfermedades cardíacas o accidentes cerebrovasculares.
Estos alimentos ultra procesados que se incluyeron en el estudio fueron: pan y cereales; salsas, untables y condimentos; snacks y postres dulces envasados; aperitivos salados envasados; bebidas azucaradas; carnes rojas, aves y pescados procesados; platos listos para comer o calentar; postres a base de yogur/lácteos; licores fuertes y bebidas endulzadas artificialmente.
Todos estos alimentos fueron divididos en 10 grupos. Los investigadores descubrieron que los snacks salados, los cereales fríos y los postres a base de yogur o lácteos se asociaron con un menor riesgo de enfermedad cardíaca, mientras que el pan ultra procesado y los cereales fríos se relacionaron con un menor riesgo de accidente cerebrovascular.
Por otra parte, los dos alimentos ultra procesados más peligrosos para el corazón resultaron ser las carnes procesadas (salazón, curado, ahumado o con conservantes químicos) y las bebidas endulzadas. Por esta razón, desaconsejaron su consumo diario. Esto se debe a que la sal puede aumentar la presión arterial, mientras que las grasas saturadas pueden aumentar el colesterol.
"Reducir el contenido de sodio, grasas saturadas, azúcares añadidos y aditivos cosméticos no esenciales para la salud humana en el pan integral, los cereales fríos y algunos bocadillos salados puede mejorar el valor nutricional de estos productos en los EE.UU.", señalaron los autores del estudio. Cabe destacar que el 57% de la dieta de los adultos estadounidenses contienen un exceso de calorías, azúcares añadidos, sodio y grasas no saludables.