01 de diciembre, 2021

Despedida

Eugenio Mandrini (1936-2021)

Eugenio Mandrini (1936-2021)

 

Se fue el flaco. Así lo informaron los amigos que se enteraron primero, y así lo reenviaron -en mensajes breves- los amigos que se enteraron después. Ninguno se atrevió a escribirlo de otro modo. No fue por tristeza, por miedo, o por superstición, fue por conocimiento: la obra de Eugenio Mandrini (tanto en poesía, en narrativa como en historieta) siempre apuntó al otro corazón de la sorpresa, porque la sorpresa tiene dos corazones, quién de nosotros no lo sabe. Y Mandrini  (también en teatro, en periodismo, y en ensayo) siempre apuntó a lo asombroso de seguir vivos, a lo sombroso de insistir en existir, de persistir en subsistir, de no largar esta obsesión de aire, agua y amor. Morir es fácil, lo otro no.

Se fue el flaco (y yo lo creo). Es como decir que Eugenio salió al patio a fumar otra vez, salió a leer las revistas «Maribel», «Vosotras» o «Selecciones policiales» de Códex -que el viento del tiempo arrastra desmemoriado-, aquellas viejas páginas donde empezó a escribir de adolescente cuentos de asombrados gauchos y algunos enigmas policiales para los amantes de las aventuras.

El flaco se fue (y yo lo creo). Es como decir que se sentó junto a los gorriones («Ah, gorrión, pájaro no esmaltado») y se puso a releer los guiones de historietas que escribió para Editorial Columba y que dibujaron, entre muchos, Mandrafina, Alberto Breccia, Trigo, Altuna, o Solano López en aquella versión de «Cabecita negra» de Germán Rozenmacher para la recodaba La argentina en pedazos de Ricardo Piglia.

             -Eugenio, ¿hacemos en breve una charla de historietas para Fierro?

-Claro, pibe. En unos días. Pasaron muchos años, pero algo me acuerdo. Qué cosa rara la historieta ¿no? Siempre me aclara la memoria. Yo empecé con Carlos Clémen, y después hice trabajos con su hermano. Me acuerdo que a veces yo firmaba como Euman o simplemente como Man. Viví de la historieta un tiempo pero yo quería vivir de la poesía, y eso fue realmente difícil. A veces se me mezclan las dos…

-En algunas de tus historietas mezclás, así como al pasar, en algún off, títulos de libros de poesía…

-(Risas) Y bueno, uno hacía lo que podía.

Decir que el flaco se fue (y yo lo sostengo) es como decir que Eugenio se fue a la cocina a comer unas empanadas, a servirse una copa de vino tinto, a conversar con Hugo Toscadaray para saber si la poesía de Eluard todavía resiste el paso del tiempo, para saber si Hölderlin se sigue riendo de todos, si Dylan Thomas sigue vaciando el Daniels. Es como decir que Eugenio se fue a hablar con Alejandro Szwarcman sobre la utilización de las comas en Borges, en Cadícamo y en Manzi…Es como decir que Eugenio se fue a saludar a Discepolo porque no hay nadie que haya descifrado como él qué pasó entre dios y ese otro flaco. «Donde estaba dios cuando te fuiste», Eugenio lo repite en el patio como lo hizo tantas noches frente a la mirada de los mozos de La Giralda, hasta que un día los mozos (y yo lo creo) se aprendieron, desesperados, la canción.

El flaco se fue (y yo lo escribo). Y es como escribir que Eugenio se fue a ver si los conejos terminaron de camuflarse entre la nieve (no mortal como la Oesterheld, sí inmortal e imaginada como del tango), y a preguntar, preguntarse y preguntarnos: «¿Qué miro yo tan fijamente en la llanura blanca cuando quiero escribir y el poema se niega? ¿Conejos en la nieve?».

Eugenio Mandrini nació en Buenos Aires el 16 de diciembre de 1936. Fue poeta, narrador y guionista de historietas. Codirigió durante 30 años la revista «Buenos Aires Tango y lo demás», y como Académico Titular de la Academia Nacional del Tango publicó el ensayo «Discépolo, la desesperación y Dios» (1998) y la antología Los poetas del tango (2000). Entre sus libros se destacan: Criaturas de los bosques de papel; Campo de apariciones y Párpados para el ojo que sale de mí (1999). Fue fundador integrante de la Sociedad de los Poetas Vivos y en 2009 obtuvo el premio Olga Orozco por su libro Conejos en la nieve y más tarde recibió el Primer Premio Municipal de Poesía (2008/2009).  

Lautaro Ortiz

Lautaro Ortiz

Es poeta, periodista, y guionista. Trabajó con los dibujantes Juan Soto, Pablo Túnica, Lucas Nine e Ignacio Minaverry. Es director de Fierro.