El Gobierno nacional usó la aplicación Mi Argentina y los altoparlantes de las cabeceras de las estaciones del ferrocarril para difundir una comunicación amenazante y antisindical. "Los sindicalistas no te dejan trabajar", se puede leer en el mensaje en la previa al paro de transporte impulsado por la Mesa Nacional del Transporte, que se realizará este 30 de octubre. La medida de fuerza se lleva adelante por 24 horas, desde las 00 de este miércoles, al que se sumaron, trenes, subtes, aeronáuticos, marítimos y camiones -además de las universidades- para exigir mejoras salariales, revisión de tarifas del transporte y en rechazo al ajuste económico de la gestión de Javier Milei.
"Los sindicalistas no te dejan trabajar. Por medida de fuerza de los gremialistas Moyano y Biró para cuidar sus privilegios, este miércoles no habrá servicios de transporte. Si te obligan a parar, llamá al 134", es el mensaje completo que difundió el Gobierno nacional, a pesar de que el derecho a huelga está protegido por el artículo 14 bis de la Constitución Nacional y un sinfín de tratados internacionales a los que la Argentina adhiere y que tienen rango constitucional. Allí, los apellidos a los que hacen referencia son conocidos: uno es Pablo Moyano, co titular de la Central General del Trabajo (CGT) y secretario general de Camioneros; y Pablo Biró, secretario general de la Asociación de Pilotos de Líneas Aéreas (APLA), ambos fuertemente enfrentados con la gestión nacional.
La amenaza fue leída y escuchada, puede decirse, por millones de personas. Tan sólo la línea Roca, cuya cabecera es Constitución, en donde sonó ese mensaje en los altoparlantes, transporta cada día cerca de un millón de personas. En tanto, la aplicación Mi Argentina, para diciembre de 2023, ya tenía más de 21 millones de personas registradas y su fin es el acceso fácil y seguro a los servicios digitales del Estado.
En la conferencia de prensa que dio el vocero presidencial, Manuel Adorni, hizo un pronunciamiento en el mismo sentido y destacó a "los argentinos de bien", que "quieren trabajar" en contraposición de los "privilegiados", que, según él, "lo que están haciendo es perjudicar a los que quieren trabajar".