El Secretario de Medios y Comunicación Pública, Francisco Meritello, renunció hoy en forma indeclinable a su cargo en una carta dirigida al presidente Alberto Fernández, en la que destaca los ejes de una gestión enfocada en la reconstrucción de los medios públicos, el "enorme desafío" de la comunicación en pandemia y los incentivos a la industria de contenidos, entre otros puntos.
Meritello estaba a cargo de la estrategia de comunicación pública y la relación institucional con los medios. En su lugar ingresará Valeria Zapesochny, persona de confianza del nuevo jefe de Gabinete de ministros. Periodista especializada en salud, ya trabajó con Manzur años atrás cuando éste se desempeñaba como titular de la cartera sanitaria en la gestión de Cristina Kirchner y también durante su primer mandato como gobernador de Tucumán.
Zapesochny ya era parte del equipó de comunicación durante la gestión de Juan Pablo Biondi, y dirigía el vínculo con los medios de comunicación del interior del país.
El siguiente es el texto de la dimisión del ex secretario:
Buenos aires, 21 de septiembre de 2021
Por la presente, hago llegar a Ud. mi renuncia indeclinable al cargo de Secretario de Medios y Comunicación Pública de la Nación, con el que fui honrado desde el 10 de diciembre 2019.
Hemos pasado casi dos años de un gobierno signado por una pandemia, arrasadora y desconocida, que cambió todas nuestras prioridades y todos los planes con los que llegamos. Comunicar en ese contexto fue un enorme desafío del que recién se tendrá dimensión dentro de algunos años.
En este tiempo realizamos más de 50 campañas publicitarias para todos los formatos, pedagógicas e informativas en torno al COVID 19, que comunicaron desde las primeras medidas sanitarias hasta la campaña de vacunación.
Asumimos con su firme convicción de unir a todos los argentinos y, desde esta Secretaría, nos hicimos carne de la consigna Argentina unida. Contribuimos de forma determinante a que en nuestro país se viva con la mayor libertad de expresión que se recuerde en mucho tiempo, sin castigos ni discriminaciones en la distribución de la publicidad oficial.
En la Argentina de hoy cualquiera expresa lo que quiere con absoluta libertad y eso es para celebrar.
Priorizamos la puesta en valor de los medios públicos, tan maltratados por la gestión precedente. Les dimos su lugar y, en el medio de la enorme crisis pandémica, los pusimos en función de una cruzada educativa: dimos clases por televisión y radio y así llegamos a ser un complemento formativo en los rincones más postergados de nuestra querida Argentina. La radio pública, la televisión pública y las señales Encuentro y Pakapaka pudieron desplegar y demostrar de manera tangible la importancia y el rol indelegable de los medios públicos en nuestra sociedad a través del programa "Seguimos Educando".
La agencia de noticias Télam volvió a tener vida, funciones y prestigio. Su página web hoy es una de las 20 más visitadas de Argentina, su servicio fue liberado durante toda la pandemia para que todos los medios pudieran acceder a sus contenidos sin costo. Desde allí dimos batalla contra las fake news con la creación de CONFIAR, y finalmente le devolvimos su rol de agencia de medios y publicidad del gobierno.
Hoy los trabajadores de los medios públicos volvieron a sentir orgullo de trabajar en ellos.
El desarrollo de la golpeada industria de contenidos, principalmente audiovisuales, fue uno de nuestros pilares principales en la gestión. Consensuado en un gran acuerdo social con todos los actores del sector, lanzamos el plan de Contenidos Argentinos, para impulsar incentivos para la exportación de los mismos vinculados a la Ley de economía del conocimiento. También incorporamos compromisos de exhibición de ficción en las pantallas locales y logramos nuevos modelos laborales de producción para todo lo que sean nuevas inversiones del exterior en el país.
Recientemente impulsamos la creación del Renacer audiovisual, instrumentado desde Contenidos Públicos SE. Concursos nacionales de series de ficción, series documentales y series de animación, tanto para los canales públicos como en co-producciones con los canales privados y plataformas locales como internacionales. Esto significa una inyección de recursos al sector del orden de los 2400 millones de pesos, que sin duda serán un extraordinario motor de despegue para esta industria.
Volvimos a poner a los canales educativos en la grilla de todos los cables del país y empezamos a ocuparnos del mantenimiento de la desinvertida TDA, para darle el vuelo que todo su potencial puede significar.
Hemos cometidos errores, pero también un sinnúmero de aciertos. Administramos con honestidad y transparencia cada uno de los gastos que el estado vuelca en esta Secretaría. Nos vamos como vinimos y eso nos llena de orgullo.
Formar parte de un proyecto superador de reconstrucción del país. Esa idea es la que hoy está en crisis. Espero que Dios lo ilumine para encontrar el camino transformador de la vida de todas y todos los argentinos.
Pancho Meritello
(Con información de Télam)