Con el objetivo puesto reducir cada vez más el gasto, Mauricio Macri prepara un plan para pagar menos en sueldos. Para ello tiene pensado imponer jubilaciones para achicar la plantilla en cerca de 25.000 personas y además no abonar los días de paro.
El Poder Ejecutivo tiene en agenda métodos innovadores para reducir el déficit fiscal. Incluso algunos que hoy día contradicen la ley, según supo El Destape por trascendidos de quienes trabajan en estos proyectos. Para eludir las dificultades, pretenden crear un nuevo marco normativo con ayuda del Legislativo.
Para Macri la única forma de achicar al Estado es que el retiro de los estatales que están en edad de hacerlo y contratar reemplazos. "Que puedan elegir no jubilarse es un disparate", opinó un funcionario.
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En esta situación se encuentran cerca de 25.000 en la nómina estatal, que cobran jubilación, pero no se resignan a su sueldo para mejorar su poder adquisitivo.
Además, el jefe de Estado se muestra a favor de que exista el derecho a huelga, garantizado por la Constitución, pero objeta que el Gobierno tiene derecho a pagar sólo por los días trabajados.
Las fuentes le aclararon a este medio que estas reformas no figuran entre las prioridades de la Casa Rosada, pero lo mantienen en la agenda para trabajarlo en los próximos meses.
Las medidas están prohibidas por la legislación actual, por lo que el Ejecutivo transferirá el borrador al Congreso cuando lo termine de redactar. Allí confían en el apoyo de algunos gobernadores desesperados por reducir sus balances rojos.
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