En la última semana, el Gobierno nacional publicó tres spots que responden a la consigna "todo es posible juntos" y que arrancan con una misma consigna: "¿Qué se necesita para...?" La estrategia de estos videos, de poco más de un minuto de duración cada uno, es llevar un mensaje de unidad hacia los argentinos, a través de los distintos actores sociales e instituciones necesarias para un objetivo: producir una empanada, conseguir un trabajo o sacar un siete en la escuela.
Más allá de este fin, todos ellos marcan diferencias entre hombres y mujeres de acuerdo su rol social según la óptica del gobierno. Según la investigación de la periodista Ximena Tordini, entre todos los spots aparecen 48 hombres y 16 mujeres, estando ellas abocadas especialmente a tareas del hogar, de enseñanza y de atención comercial. Por el contrario, los hombres son reflejados como funcionarios públicos, profesionales y dueños de fábricas.
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"Es una campaña de comunicación pública, en la que el mensaje que da el Estado es que las mujeres tenemos una participación menor (no del 50%, sino del 25%), y centrada en el trabajo doméstico y en las tareas de cuidado de los hombres para que ellos puedan desempeñarse en la vida pública (planchar la camisa, hacer la comida, alentarlos a que consigan un trabajo)", afirma Tordini a El Destape.
"Este tipo de mensajes ayudan a consolidar sociedades desigualitarias", asegura la periodista. Y agrega: "La campaña le falta el respeto a miles de mujeres que han luchado por poder ocupar otros lugares en la sociedad, y muchas veces lo han pagado carísimo".
Para cerrar, Tordini recomienda: "La comunicación pública debería promover una representación igualitaria de hombres, mujeres y otras identidades de género".
Al final de los spots, Macri asegura: "Así como nos juntamos todos los días para hacer que las cosas pasen, nos tenemos que juntar para estar cada día mejor".
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