Los limpiaparabrisas se utilizan para limpiar el parabrisas de un coche de modo que el conductor tenga una vista despejada de la carretera. Un ángulo de limpieza típico para un coche de pasajeros es de aproximadamente 67 grados. Las cuchillas tienen 12-30 pulgadas (30-76 cm) de largo con longitudes en incrementos de 2 pulgadas (5 cm).
Los limpiaparabrisas están diseñados y fabricados para limpiar el agua del parabrisas. La mayoría de los coches tienen dos limpiaparabrisas en el parabrisas, y pueden tener uno en la ventana trasera y uno en cada faro. Las partes visibles del limpiaparabrisas desde el exterior del coche son la cuchilla de goma, el brazo del limpiaparabrisas que sostiene la cuchilla, un enlace de resorte y partes de los pivotes del limpiador.
El limpiador en sí tiene hasta seis partes llamadas puntos de presión o garras que son brazos pequeños debajo del limpiador. Las garras distribuyen la presión del limpiador a lo largo de la parte posterior de la cuchilla.
Por consiguiente, los limpiaparabrisas cumplen una labor de mucha importancia ya que se encargan de mantener limpio el parabrisas de modo tal que el conductor pueda tener una visualización óptima del contexto. Por esta razón, cuando los limpiaparabrisas no cumplen bien su trabajo, es momento de reemplazarlos, y en www.recambioscoches.es puedes encontrar los recambios de los limpiaparabrisas de calidad que se ajusten perfectamente a tu coche.
Las funciones de los limpiaparabrisas
Hay una serie de características disponibles para complementar el limpiaparabrisas, incluido el uso de líquido limpiaparabrisas. Los limpiaparabrisas suelen funcionar junto con una bomba que suministra una mezcla de detergente, alcohol y agua desde un tanque especial al parabrisas. Pequeñas boquillas que se montan en el capó del coche dispensan el líquido.
Algunos vehículos grandes también están equipados con limpiaparabrisas ocultos. Cuando se apagan los limpiaparabrisas, un mecanismo los mueve a un área inferior cerca del fondo del parabrisas y debajo del borde del capó para que estén completamente fuera de la vista.
Muchos coches también cuentan con limpiaparabrisas automáticos programables por el conductor. Estos limpiaparabrisas son capaces de detectar tanto la presencia como la cantidad de humedad en el parabrisas. Un sensor ajustará la frecuencia y la velocidad de las cuchillas automáticamente en función de la cantidad de fluido detectado. Una anulación manual también está disponible para que puedas controlar las cuchillas si lo deseas.
Hay coches que tienen limpiaparabrisas pequeños ubicados en los faros. Otros coches incluyen limpiaparabrisas ubicados en la ventana trasera del vehículo. Los limpiaparabrisas traseros se encuentran comúnmente en coches utilitarios deportivos, minivans y camionetas.
Consejos para el mantenimiento de los parabrisas
Las escobillas del limpiaparabrisas se deben reemplazar cada seis meses a un año o tan pronto como notes una diferencia en la visibilidad de manejo. Cuando las escobillas de los limpiaparabrisas ya no hacen contacto adecuado con la superficie del parabrisas, pueden comenzar a chirriar, rayar o manchar, lo que reduce la visibilidad de manejo.
Al inspeccionar las escobillas busca lo siguiente:
- Marco roto: desprendimiento de los brazos del marco en las juntas o puntos de conexión.
- Corrosión de metal, especialmente en las juntas y garras.
- Grietas visibles, rasgaduras y piezas faltantes en el borde de la escobilla de goma.
- Flexiona la escobilla de goma de un lado a otra para ver si aún es flexible. Los raseros viejos tendrán dificultades para adaptarse a la forma de tu parabrisas y crearán rayas.
- Verifica que el borde de limpieza de la escobilla de goma no tenga bordes redondeados, lo que puede evitar que la cuchilla del limpiador haga un fuerte contacto con el parabrisas y reduce la calidad de la limpieza.
- Tira para asegurar que la cuchilla limpiadora se haya instalado de manera segura en el brazo del limpiador.
Cerrar sesión