De Andreis defendió al funcionario con cuenta en Andorra: "Es una situación privada"

El secretario general de la Presidencia, Fernando de Andreis, respaldó a su segundo luego de que el diario español El País revelara que manejaba una empresa con 1,2 millón de dólares (un millón de euros) en una cuenta en Andorra.

En conferencia de prensa en medio del retiro espiritual de Chapadmalal, De Andreis ratificó en su cargo a Valentín Díaz Gilligan, subsecretario general de la Presidencia y quien aseguró que prestó su nombre a Paco Casal para tener dicha cuenta bancaria a través de la empresa radicada en Panamá Line Action. "Es una situación entre privados", dijo De Andreis sobre el funcionario de su área.

"No tiene una empresa offshore, fue asesor de varias empresas en su vida. Es una situación previa de que fuera funcionario, es una situación de índole privada", aseveró.

De Andreis afirmó que "está todo a disposición de la Justicia y la Oficina Anticorrupción", comandada por la funcionaria hipermacrista Laura Alonso. El joven funcionario dijo que están "tranquilos con las explicaciones que viene dando" Díaz Gilligan.

Díaz Gilligan ocupó diversos cargos como funcionario del área turística del Gobierno de la Ciudad, cuando Macri era jefe de Gobierno. La cuenta bancaria se abrió en 2012 y, de acuerdo a la investigación del diario madrileño, se mantuvo activa hasta, al menos, diciembre de 2014, cuando la entidad financiera advirtió que se trataba de una persona políticamente expuesta (PEP), como se denomina a funcionarios, ex funcionarios o personas vinculadas a políticos que deben someterse a un mayor control del origen y destino de los fondos que manejan.

Gilligan vendió Line Action,a la empresa titular de la cuenta, en noviembre de 2014, casi un año después de llegar a la función pública, Sin embargo, casi inmediatamente comenzó a figurar como director de la empresa. El dinero provenía de transferencias de jugadores de fútbol, un mundo que Macri conoce muy bien. Consultado por El País, Díaz Gilligan afirmó insólitamente que el dinero no era suyo sino del empresario uruguayo "Paco" Casal, quien le habría pedido prestar su nombre.