El club del derrumbe mortal de Mallorca carecía de permiso para la azotea, según el alcalde

28 de mayo, 2024 | 09.31

El Medusa Beach Club de Palma de Mallorca, que se derrumbó la semana pasada causando la muerte de cuatro personas, no tenía permiso para atender a los clientes en su azotea, dijo el martes el alcalde de la ciudad.

Dos alemanas, un senegalés y una española murieron al derrumbarse el 23 de mayo el edificio de dos plantas del restaurante situado junto a la playa.

"La planta cubierta no disponía de licencia de actividad, ni autorización, para ocupar la terraza", dijo el martes a los periodistas el alcalde, Jaime Martínez Llabrés, al tiempo que desvelaba el contenido de varios informes del ayuntamiento relacionados con el accidente.

Este contenido se hizo gracias al apoyo de la comunidad de El Destape. Sumate. Sigamos haciendo historia.

SUSCRIBITE A EL DESTAPE

Martínez Llabrés dijo que la investigación preliminar demostró que el accidente fue causado por el peso excesivo de un gran número de personas en la azotea, que había sido reformada sin la preceptiva autorización municipal.

Había unas 21 personas en la azotea en el momento del derrumbe, según el jefe del cuerpo de bomberos de la ciudad, Eder García.

Los bomberos dijeron que el club suele repartir sus mesas por la terraza, pero esa noche había colocado una mesa más grande para un grupo de 12 turistas neerlandeses, lo que creen que pudo provocar el derrumbe.

"Allí arriba no debía haber habido nada", dijo García.

El accidente se produjo mientras las mediterráneas islas Baleares se preparan para una temporada turística de verano que se espera que atraiga a millones de visitantes.

Las víctimas alemanas eran dos mujeres de 20 y 30 años, el senegalés tenía 44 y la camarera española, 23.

Martínez Llabrés dijo que los informes se habían enviado a la policía y a la fiscalía. El ayuntamiento también tomará parte en cualquier futura demanda por el derrumbe.

Con información de Reuters