El ejército ruso dijo el martes que sus fuerzas habían tomado el control de lo que describió como el centro logístico estratégicamente importante de Niu-York en el este de Ucrania, parte de la campaña de Moscú para capturar toda la región de Donetsk.
Incluso en un momento en que las tropas ucranianas tratan de avanzar en la región rusa de Kursk tras el ataque transfronterizo sorpresa lanzado el 6 de agosto, el destino de Niu-York –que Reuters no pudo confirmar de forma independiente– es un recordatorio de que el ejército ruso está presionando con su propia ofensiva en el este de Ucrania a pesar de todo.
Rusia se refiere a la localidad de Niu-York —a la que Ucrania devolvió su nombre original en 2021— como Novgorodskoye, el nombre en ruso de la época soviética del asentamiento.
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"Como resultado de la intensa acción de las unidades de la 'Agrupación Centro' de tropas, una gran agrupación de efectivos enemigos fue aplastada y uno de los mayores asentamientos de la aglomeración de Toretsk y el centro logístico estratégicamente importante de Novgorodskoye (...) fue liberado", dijo el Ministerio de Defensa ruso en un comunicado.
El ejército ucraniano no respondió inmediatamente a una solicitud de comentarios sobre la situación actual del asentamiento.
Con una población anterior a la guerra de poco menos de 10.000 habitantes, Niu-York está en la línea de ferrocarril que va a Sloviansk, una de las ciudades del este de Ucrania que Moscú lleva tiempo queriendo tomar.
El ejército ucraniano dijo a primera hora del martes que se estaban produciendo intensos combates en el sector de Toretsk, incluida Niu-York, ante informaciones de blogueros militares rusos que afirmaban que las fuerzas de Moscú estaban llevando a cabo operaciones de barrido en Niu-York.
En un informe matutino, el grupo de fuerzas ucranianas de Jortitsia dijo en Telegram que el ejército ruso había intentado avanzar 24 veces en varias zonas, incluida Niu-York.
El lunes, Vladimir Rogov, un dirigente apoyado por Rusia, publicó un vídeo de un soldado ruso izando la bandera rusa en lo alto de lo que parecía un edificio administrativo en Niu-York, mientras una bandera ucraniana carbonizada yacía en el pavimento exterior.
Con información de Reuters