Bullrich, el ariete de Milei en la batalla con el PRO

La ministra de Seguridad buscó reafirmar su lealtad a Javier Milei y coherencia con el cambio pero, en el camino, atacó a todos sus ex compañeros de gobierno y el archivo saltó a la luz.

16 de enero, 2025 | 00.05

Sólo en la última semana, Patricia Bullrich lamentó haber sido dura con Javier Milei en la campaña, buscó despejar cualquier tipo de dudas sobre su apoyo al presidente desde el comienzo, atacó a sus ex compañeros de gobierno y fue blanco de las críticas PRO. La ministra de Seguridad, enfocada en llevar agua para la orilla libertaria, encendió el ventilador. El presidente la tomó como una de sus funcionarias favoritas, con halagos por demás grandilocuentes y una ponderación excesiva de su gestión. Desde ese lugar, la funcionaria colabora con los libertarios en lo que le piden, sin descuidar sus propios intereses.

Ante algunas notas que buscaron hurgar en el pasado electoral más reciente, Bullrich tuvo que salir a mostrar una suerte de lealtad a Milei que nadie le pidió. No sólo se cuestionó a sí misma las duras críticas al actual presidente durante la campaña, sino que reflotó un viejo chat, de inicios del 2022, con la elección ejecutiva aún muy lejana, en el que se mostraba abierta a una alianza con los libertarios cuando el resto de los dirigentes del entonces Juntos por el Cambio la resistía (como hoy).

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Pero sus esfuerzos no sólo se concentraron en mostrar su coherencia con el cambio, sino en atacar a sus viejos socios. Lo hizo con Horacio Rodríguez Larreta, sin que quedara del todo claro por qué decidió confrontar con alguien a quien considera un “cadáver político”, pero también lo hizo con Mauricio Macri y cruzó un límite.

El ex presidente aparece como un dirigente fácil de golpear, al menos a los ojos de un oficialismo y aliados confiados en que arrollarán en las elecciones de este año. Pero, así como es un blanco sencillo, también es peligroso. El PRO de Mauricio tiene apoyo en la CABA, el de las “Mabeles” que no quieren peronismo pero que tampoco soportan a La Libertad Avanza. Para conquistar ese sector, golpear a Macri no parece ser la mejor opción. Un dirigente suele repetir que el votante amarillo eligió a Milei para terminar con Cristina Kirchner y no con el líder PRO.

Patricia, más para beneficio del gobierno nacional que propio, apuntó contra todos los dirigentes de su mismo sector ideológico, aquellos en los que se referencian varios de los votantes a los que ella quiere conquistar. Con la intención de levantar la firmeza libertaria, Bullrich cuestionó la gestión de Cambiemos en materia represiva. Pero también lo hizo a la hora de hablar de economía.

Según el relato de la ministra, compartido por otros dirigentes amarillos, la gestión de Cambiemos fue muy blanda y le impidió reprimir más a fondo cuando ella estaba dispuesta a ir por todo. Lo narró en Carajo Stream y es un discurso repetido en las filas macristas: Marcos Peña llamó para que frente la mano con la represión en el Congreso durante el debate de la reforma previsional.

Apuntó, también, contra la política cambiaria del gobierno en un cruce con el ex ministro Hernán Lacunza, al que le recordó que la gestión de Cambiemos puso el cepo al dólar. Toda una palabra prohibida. No dijo que ella formó parte de ese gobierno y que no se quejó en su momento. Por eso su verborragia no fue vista como parte de un acierto estratégico.

Estos sincericidios espontáneos le valieron varias críticas en las redes, todas enfocadas en lo mismo: defender a Mauricio y dejarla, ante los ojos de la política, como una dirigente que usa estructuras ajenas para beneficio personal.

Desde la Juventud PRO salieron con un durísimo mensaje en X, donde le recordaron que “el partido te dio la oportunidad de ser diputada, ministra y candidata a presidenta. Sin embargo, tu actitud hacia Mauricio Macri, quien ha sido fundamental en tu carrera política, nos parece desagradecida”. La acusaron de haber dado información falsa sobre el supuesto llamado para cancelar la represión y le recordaron que, en campaña, se quejó por la falta de crítica del ex presidente a Milei.

“Esta actitud refleja el mismo patrón que has demostrado en todos los partidos por los que pasaste a lo largo de tu extensa trayectoria. No tenemos dudas de que repetirás este comportamiento con La Libertad Avanza en el futuro”, cerró el texto que no dejó lugar a la imaginación.

El otro que salió a declarar la guerra fue Guillermo Dietrich, ex ministro de Transporte, quien le echó en cara que en los cuatro años de colegas de Gabinete, en la gestión de Macri, no la escuchó esbozar “ninguna crítica de esta índole”. Además, trajo al presente el apoyo tanto de Mauricio como de Marcos Peña cuando ocurrió el caso Santiago Maldonado, que murió después de una brutal represión de Patricia en la Patagonia.

No es la única relación que está rota porque, si bien se apuesta a acuerdos políticos en prácticamente todo el país, la Ciudad está que arde. Algún dirigente piensa que son fuegos de artificio y que eventualmente acordarán tanto el PRO como LLA pero, de momento, la Capital Federal es un campo de batalla.

Pilar Ramírez, legisladora libertaria que responde a Karina Milei, no frena con sus cuestionamientos a la gestión de Jorge Macri. Uno de los últimos estuvo orientado chicanear al jefe de Gobierno por sus anuncios de reducción de la estructura del Gobierno local. La Juventud PRO capitalina la cruzó en las redes, con el aval de la Juventud nacional, sin ningún tipo de modal: “Hola Pilar, estás segura que no hablas de vos? Porque no podemos pensar en nada más ineficiente, caro y absurdo que una camporista disfrazada de libertaria”.