Las tropas israelíes se abrieron paso de nuevo en un sector oriental de Jan Yunis en una incursión sorpresa, informaron los residentes el lunes, haciendo huir de nuevo a las personas que habían regresado a sus hogares abandonados en las ruinas de la principal ciudad del sur de la Franja de Gaza.
En otros lugares de Jan Yunis se recuperaron decenas de cadáveres de lo que, según las autoridades palestinas, eran fosas comunes en el emplazamiento del principal hospital de la ciudad, abandonado por las tropas israelíes. Más al sur hubo nuevos ataques aéreos contra Rafah, el último refugio en el que se han resguardado más de la mitad de los 2,3 millones de habitantes del enclave.
Israel retiró de forma abrupta la mayoría de sus tropas terrestres del sur de la Franja de Gaza este mes, tras algunos de los combates más intensos de los siete meses de guerra. Los residentes han comenzado a regresar a sus hogares en barrios antes inaccesibles de lo que había sido la segunda ciudad más grande del enclave, encontrando casas reducidas a escombros y muertos no recuperados en las calles.
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"Esta mañana han regresado muchas familias que se habían marchado de aquí en las últimas dos semanas para volver a sus hogares en Abassan. Estaban demasiado asustados", dijo a Reuters Ahmed Rezik, de 42 años, desde una escuela donde se refugia en la parte occidental de Jan Yunis, en referencia a un distrito del este.
"Dijeron que los tanques entraron en la zona oriental de la ciudad bajo un intenso fuego y que tuvieron que correr para salvar sus vidas", dijo a Reuters a través de una aplicación de chat.
Israel lanzó su guerra en Gaza después de que combatientes del grupo militante islamista Hamás que dirige el enclave irrumpieran a través de la valla fronteriza el 7 de octubre, matando a 1.200 personas y capturando a más de 250 rehenes, según los recuentos israelíes.
Israel respondió lanzando un ataque terrestre contra Gaza, prometiendo aniquilar a Hamás. Según las autoridades sanitarias gazatíes, desde entonces se ha confirmado la muerte de más de 34.000 personas, y se teme que haya miles de cadáveres más perdidos entre los escombros.
En las ruinas de lo que fue el hospital Nasser, el mayor del sur de Gaza, Reuters vio a trabajadores de emergencias con trajes blancos para materiales peligrosos sacando cadáveres del suelo con herramientas manuales y un camión excavadora. Los servicios de emergencia informaron de que en el último día se habían encontrado 73 muertos más en el lugar, lo que eleva a 283 el número de cadáveres hallados a lo largo de la semana.
Israel afirma que se vio obligado a combatir en el interior de los hospitales porque allí operaban combatientes de Hamás, lo que el personal médico y Hamás niegan.
Las autoridades de Gaza afirman que los muertos recuperados hasta ahora proceden sólo de una de las al menos tres fosas comunes que han encontrado en el lugar.
"Esperamos encontrar otros 200 cadáveres en la misma fosa común en los próximos dos días, antes de empezar a trabajar en los otros dos cementerios", dijo a Reuters Ismail Al-Thawabta, director de la oficina de medios del gobierno de Hamás.
Acusó a Israel de llevar a cabo "ejecuciones" en el hospital y de encubrir los crímenes enterrando los cadáveres con una excavadora. Israel niega rotundamente haber llevado a cabo ejecuciones.
Los familiares han acudido a llevarse a sus seres queridos para volver a enterrarlos. El lunes llevaron el cadáver de Osama al-Shoubagy, uno de los recuperados dentro del recinto del hospital, a un cementerio para volver a enterrarlo junto a su hermana, a la que en una ocasión había donado un riñón cuando estaba enferma.
"Mi hija pequeña me pidió que visitara la tumba de su padre. Yo le decía que en cuanto le enterráramos, iríamos a visitarle. Gracias a Dios. El panorama es duro, pero quizá encontremos algo de alivio después de enterrarlo", dijo su esposa Soumaya.
Los residentes de Gaza informaron de ataques aéreos en varias otras zonas, incluida Rafah, donde un día antes los médicos habían practicado una cesárea para salvar a un bebé del vientre de su madre, que se encontraba entre las víctimas mortales.
En Nusseirat, en el centro de Gaza, las autoridades dijeron que un ataque aéreo había dañado los paneles solares de los que depende el hospital para obtener energía.
(Escrito por Peter Graff; editado en español por Manuel Farías)