El Ejército israelí emitirá el domingo avisos de llamada a filas a 1.000 miembros de la comunidad ultraortodoxa, en una nueva fase de la divisiva batalla sobre la incorporación de los religiosos jaredíes a la fuerza.
La medida sigue a una sentencia de la Corte Suprema del mes pasado que ordenaba al Ministerio de Defensa poner fin a la antigua exención del servicio militar para los estudiantes de seminarios judíos en virtud de disposiciones adoptadas poco después del nacimiento del Estado de Israel, cuando su número era muy reducido.
Los dos partidos religiosos del gobierno del primer ministro Benjamín Netanyahu se han opuesto frontalmente a la medida, lo que ha puesto en serios aprietos a la coalición de derecha formada tras las elecciones de 2022.
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Los líderes de la comunidad ultraortodoxa, en rápido crecimiento, dicen que obligar a los estudiantes de seminario a servir junto a israelíes laicos, incluidas las mujeres, crea el riesgo de destruir su identidad como judíos religiosos. Algunos rabinos han instado a todos los miembros de su comunidad que reciban órdenes de llamada a las filas a que las quemen.
Tras la primera serie de convocatorias, se espera que en las próximas semanas se envíen nuevos avisos para un total inicial de 3.000 reclutas ultraortodoxos.
El gobierno sigue intentando aprobar una ley de reclutamiento que podría crear una avenencia limitada y resolver la cuestión antes de que amenace la estabilidad de la coalición.
Sin embargo, con las tropas israelíes todavía luchando en Gaza, y una creciente amenaza de guerra en Líbano, la presión del Ejército y de los israelíes laicos para repartir la carga de servir en la fuerza ha aumentado considerablemente.
Los israelíes están obligados por ley a servir en el Ejército a partir de los 18 años entre 24 a 32 meses. Los miembros del 21% de la minoría árabe de Israel están en su mayoría exentos, aunque algunos sí sirven.
No todos los jaredíes se niegan a servir y las Fuerzas de Defensa israelíes han creado varias unidades especiales para los ultraortodoxos. Pero la resistencia al reclutamiento ha provocado semanas de protestas de manifestantes que coreaban "muerte antes que reclutamiento" y otros lemas.
Con información de Reuters
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