"Desde 2015, la seguridad es una prioridad", había lanzado María Eugenia Vidal el año pasado. Sin embargo, durante toda su gestión le redujo a los policías 29% de su poder adquisitivo, como reveló El Destape. El gobernador Axel Kicillof atendió ese problema heredado y desarmó la protesta ilegal. El aumento anunciado del 36% no sólo recupera lo perdido sino que sobrepasa la demanda en al menos siete puntos para el escalafón más bajo.
En los cuatro años de gestión, Cambiemos redujo a paso firme la capacidad de compra de los salarios de todos los trabajadores por igual, lo que generó un malestar social generalizado que se expresó en las calles, con represiones continuas. La Policía Bonaerense no fue la excepción entre los perjudicados, pero a diferencia del resto de la sociedad no hicieron públicas sus quejas. Si bien se trata de una fuerza que la constitución le prohíbe sindicalizarse, esto no frenó a un grupo de agentes a rodear la quinta presidencial esta semana, en lugar de reclamarle al gobierno provincial que les bajó el salario.
En 2016, Vidal incrementó un 33% en promedio los ingresos de los oficiales del Ministerio de Seguridad, según se desprende del análisis de la documentación de esa época que hizo este medio. En ese año la inflación se disparó al 36,7%, con lo que la Policía perdió 2,7% de su capacidad de compra. En 2017, la ex gobernadora mejoró sus ingresos 23,6%, por debajo del 24,8% que registró el Indec para el aumento de precios generalizado. De modo que la brecha fue del 0,9%, lo que acumuló una quita del 3,6%.
El proceso de depreciación se aceleró en la segunda parte de la gestión de Vidal, a la par de la caída en picada del modelo económico nacional. Para 2018, la gobernación les dio un incremento del 30,6%, mientras que la inflación marcó un 47,6%. Por lo tanto, el sueldo real de los policías cayó 11,6% en esos doce meses y 14,7% en tres años. La consolidación de la destrucción del modelo de Cambiemos llegó en 2019 junto a la derrota electoral. Allí Vidal entregó una suba del 28,1%, mientras que la inflación se escapó al 53,8%. Esto derivó en un derrumbe del 16,7% del poder adquisitivo.
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Gracias a los cuatro años de Vidal, los trabajadores policiales vieron que su salario perdió un 29% acumulado de capacidad de consumo. Pese a ello nunca se armaron y subieron a los patrulleros del Estado para rodear la residencia presidencial por más de dos días seguidos. Tampoco lo hicieron en la base militar de Morón, a donde se había mudado la entonces gobernadora, en efecto la responsable de la caída.
Desde diciembre de 2019 un oficial de la Bonaerense gana $ 34.761 de bolsillo más $ 1.130 del ítem para uniforme. Es decir, que se lleva en mano $ 35.891 sin tener en consideración los adicionales que pueda llegar a hacer en el mes. "Va a haber una equiparación inmediata de 39.521 oficiales de policía que pasarán a percibir un salario de bolsillo $ 44.000" anunció Kicillof esta mañana. Además, más que triplicó el ingreso para la vestimenta a $ 5.000. "Ningún policía que se egrese tendrá un salario menor a los $ 49.000", sostuvo Kicillof.
De este modo, el dinero en mano de la categoría más baja de la Policía provincial aumentará 36,5%, desde los casi $ 36.000 a los $ 49.000. Esto más que compensa la caída del 29% acumulada en los cuatro años de Vidal e incluso los posiciona siete puntos por encima del poder adquisitivo que tuvieron en 2015.