Las Leliqs (Letras de Liquidez del BCRA tienen un plazo de 7 a 29 días), las Notaliq (Notas de Liquidez del BCRA, con un plazo de 30 días en adelante ) y los pases pasivos (de uno a 6 días), son instrumentos financieros para “esterilizar” pesos que primero se emiten y, luego, se retiran del sistema económico. Son “encajes remunerados” que se retroalimenta mes a mes generando emisión monetaria para erogar intereses (y eventualmente capital).
Es decir, es una manera cara e insustentable y subordinada -genera cada vez más poder de negociación en el “acreedor” que las posee- de hacer “política monetaria”. Resigna así las atribuciones del Estado, delegadas en el Banco Central. Se las pretende presentar como “soluciones de mercado”, pero en realidad es el aprovechamiento del Estado por parte de actores del sistema financiero, que obtienen ganancias seguras, sin ningún riesgo, mientras “esterilizan” el sistema monetario, con la convalidación del BCRA. A la vez, le ponen un piso a la tasa de interés, o presionan para que suba, les permite quedarse en su poder una masa creciente de instrumentos muy útiles para empujar o forzar una devaluación.
La situación creada es demostrativa del fracaso de un marco conceptual más amplio: la incapacidad de los bancos para asignar eficientemente los flujos financieros. "¿Cómo pueden coexistir bolsones de pobreza con bolsones de liquidez? ¿Cómo puede la sociedad enfrentar restricción de crédito o tasas de interés prohibitivas en un marco de “esterilización” de liquidez? ¿Por qué no pueden usarse los fondos involucrados para revitalizar la economía real en un contexto de recesión?", se pregunta Horario Rovelli de CIFRA de la CTA.
Porque los bancos conjugan su incapacidad para asignar eficientemente el crédito con la búsqueda de rentabilidad de corto plazo en un sistema regulatorio que pone el vértice en la valorización financiera en desmedro de la producción de bienes y servicios. Actualmente (octubre 2023) el stock de Leliq y Notaliq es de 14.853.968 millones de pesos, al que debe sumarse los pases por 6.586.671 millones de pesos, es decir, que suman 21.440.639 millones de pesos -monto por el cual se pagan intereses, conforman el déficit cuasi fiscal (o déficit del BCRA).
Otras preguntas que se hace el estudio y sus reflexiones al respecto
https://www.eldestapeweb.com/economia/dolares/en-medio-de-la-tension-cambiaria-el-gobierno-unifico-a-731-el-dolar-qatar-tarjeta-y-solidario-202310108290
-¿Qué riesgo implica el actual stock de Leliq para la economía local? ¿Añade presiones sobre la deuda?
Seguro, los bancos, sobre todo los más grandes son los que más Leliq y Notaliq poseen, nos basamos en la información que es publicada por el BCRA con considerable atraso, al 10 de octubre de 2023 está publicado el informe de las Entidades del Sistema Financiero Argentino al mes de mayo 2023, pero demuestra palpablemente que el principal negocio de las entidades privadas más grandes, es prestarle al BCRA, en Leliq (Letras de Liquidez del BCRA) y otros encajes remunerados y, al Tesoro de la Nación, que se imputa contablemente en el rubro “Títulos públicos y privados”.
Los bancos privados utilizan la autorización para funcionar para captar depósitos de la población y en lugar de asumir riesgos y financiar a la producción y al consumo, se posicionan en títulos (principalmente del mismo BCRA) y del Tesoro de la Nación. A su vez, los bancos privados más grandes recibieron y reciben órdenes de sus depositantes para realizar operaciones de CCL (contado con Liqui) y dólares MEP (Mercado Electrónico de Pago de la Bolsa de Comercio) en todos estos años, que es una operatoria encubierta con la liquidez con que se quedan
-¿Con la suba de la tasa de interés al 118% por parte del Banco Central, ¿cómo impacta en las Leliq?
La tasa efectiva mensual (de una tasa nominal anual de 118%) es de 9,69%, por ende, el volumen total de Leliq y Notaliq, devenga un interés mensual de 1, 5 Billones de pesos ($ 14.853.968 millones x 9,69% = $ 1.439.350 millones), que si se le suma los pases pasivos que devengan una tasa menor (del 111% anual) implica un interés mensual que reciben los bancos por encajes remunerados de unos 2 billones de pesos
-Dado que las Leliq son instrumentos en manos de entidades bancarias, ¿cómo podría resolverse esta deuda? Y cuáles son los escenarios posibles?
Una parte de las inmovilizaciones del BCRA debe financiar el gasto público y otra parte dirigirse a determinados sectores de la producción y el trabajo, por ejemplo para financiar la construcción de viviendas, que no tienen ningún insumo importado (no se va a importar por ejemplo, mármol de carrara). Para ello se debe transformar el stock de Leliq y Notaliq y parte de los pases pasivos, en stock de otro activo remunerado, a un plazo de un año y a una tasa mensual variable similar a la tasa pasiva promedio, e ir liberando en cuotas tal tenencia, de ese modo y a una tasa regulada o administrada por el BCRA, el enorme stock de Leliq y Notaliq y parte de Pases Pasivos, se transformaría en un factor de expansión monetaria aplicado al restablecimiento de niveles de demanda privado y estatal. Transformar las Leliq y parte de los Pases Pasivos en un bono a 10 años y, la constitución de un fondo fiduciario para generar créditos genuinos para el Estado y para la producción y el trabajo y, de esa manera, consolidar y “calzar” los depósitos con los nuevos créditos.
-¿Qué desafío tendrá la próxima administración respecto de las Leliq?
El Estado a través del BCRA asume una política de intervención directa en la administración de los encajes remunerados (el que paga los intereses es el BCRA) y administra esos fondos como se lo señala en el punto anterior, o toda esa masa de dinero se pasa a divisas “fondeando” la corrida cambiaria con la corrida bancaria