A lo largo de la historia, Carlos Bilardo dejó miles de historias y anécdotas para contar en los diversos clubes entre los que estuvo. Uno de ellos fue el Sevilla, donde dejó su recuerdo más grande con una situación ocurrida con uno de sus ayudantes: el fisioterapeuta. El "Doctor" le gritó "Pisalo, pisalo" al masajista y eso quedó en una de las anécdotas más llamativas. Sin embargo, desde la institución andaluz ahora confirmaron la muerte de ese protagonista y la situación enlutó a todo el fútbol español.
El hombre en cuestión es Domingo Pérez y todo el fútbol lo conoció a partir de esa anécdota. El masajista era empleado del club andaluz y su fama trascendió las fronteras cuando, en un encuentro entre Deportivo La Coruña y Sevilla, Domingo fue a ayudar a su jugador, pero también se tomó un tiempo para ayudar al jugador del equipo rival que también estaba tendido en el piso. Allí Bilardo, enojado, le gritó: "A Diego, a Diego ¡¡Domingo!! ¡¡Domingo!! La concha de tu madre... Ah, en vez de agarrar a Diego, agarra al otro. Nació en la cancha este muchacho... Me quiero morir, me quiero morir. Los de colorado son los nuestros ¡Qué carajo me importa el otro! ¡Pisalo, pisalo, pisalo, pisalo!".
Lo cierto es que esta situación que se hizo muy conocida lo catapultó a la "fama" por su buena voluntad, ya que también quiso atender a un futbolista del equipo rival. El hecho ocurrido el 6 de febrero de 1993 significó, además, uno de los pocos encuentros que tuvo al Doctor al mando del equipo. En la jornada del pasado martes 18 de julio, el conjunto andaluz confirmó la lamentable noticia de su fallecimiento a los 67 años. Domingo Pérez había reemplazado a su papá en el cargo que, a su vez, había sucedido al abuelo para ser el masajista del club y de la institución.
La pelea de Maradona con Bilardo
Fue el último partido de Maradona. Ocurrió el 13 de septiembre de 1993, ese día Diego Maradona tuvo que jugar infiltrado -algo muy común en él- por molestias musculares. En el segundo tiempo del encuentro ante el Burgos, Bilardo decidió que salga del encuentro. Completamente sacado, el 10 del Sevilla encaró al entrenador y empezó a insultarlo: "La puta que te parió, esto tenemos que arreglarlo de hombre a hombre, aunque dudo de que lo seas". Ese día, las cosas parecían haber terminado.
Tiempo después, en una entrevista, el "Doctor" contó que no se dio cuenta de las cosas que le dijeron. Sin embargo, se dio cuenta que todo era peor al día siguiente. En una charla con El Gráfico reveló que fue al entrenamiento: "Yo esperaba a Diego en el entrenamiento, pero no vino. A la tarde me fui para su casa y nos peleamos, nos agarramos a trompadas. Enseguida Claudia y Franchi (NdeR: su representante) nos separaron". Ese día fue la última vez que Maradona usó la camiseta blanca del Sevilla. Pero la unión con Bilardo se mantuvo y, entre otras cosas, volvieron a trabajar juntos en Boca.