La harina Blancaflor cambió su histórico logo y revolucionó las redes

La ilustración de una cocinera negra en su paquete de harina leudante fue eliminada ante las críticas por racismo.

26 de mayo, 2021 | 10.51

La cocinera negra que acompañó a la marca de harinas Blancaflor desde sus inicios fue sacada del paquete. La marca salió al mercado en 1956 y siempre tuvo la imagen de una cocinera de tez oscura, con una curiosa mano de sólo cuatro dedos. En este trimestre decidieron quitarla.

“Blancaflor es la marca pionera que creó la famosa harina leudante aportándole practicidad al amasado casero. Con una trayectoria de más de 60 años, sigue siendo la aliada indispensable de quienes disfrutan de amasar con un producto único”, describe Molinos, el holding alimenticio del grupo Pérez Companc.

En una decisión de marketing, Blancaflor modificó el diseño de su paquete celeste de harina leudante y modernizó su histórico packaging. Quitó a la cocinera negra, que se encontraba sobre un fondo rojo, y ubicó a su tradicional logotipo dentro de un palo de amasar. También, ilustró con una foto, de manos batiendo, y dejó de lado la ilustración original.

Bajo un nuevo paradigma, la representación de la mujer negra, asociada a un pasado colonia, con camisa, sombrero de cocinero, aros blancos y delantal rojo, podía llegar a ser un problema para la marca.

Los cambios de Blancaflor

La cocinera sobrevivió a todos los rebranding, pero el año pasado algo cambió. Hasta los más memoriosos recuerdan que la cocinera tuvo una nena que fue la estrella de la margarina Blancaflor, pero no tuvo larga vida. En los ’90, la marca se modernizó, pero mantuvo el logo original y sólo hubo cambios menores. En 2014 hubo otro rediseño, pero la cocinera siguió firme.

Con el auge del Me Too y todo el movimiento que revaloriza los derechos de las mujeres comenzaron a replicarse cada vez más las críticas en redes sociales al histórico logo de la marca. Desde septiembre del año pasado las quejas fueron subiendo de tono y Molinos comenzó a evaluar la salida de escena de su cocinera de tez oscura. Los acusaban de racistas, de machistas y de esclavistas.

Molinos comenzó un rebranding entero, en su marca madre y en el resto. Varios focus group señalaron que Matarazzo y Luchetti también necesitaban un cambio. Algunos hasta se preguntan si el tradicional personaje de Cocinero, que si bien rejuveneció con los años, seguirá igual o le quitarán el sombrero.