Los cambios de "angelitas" en LAM (América TV) sigue teniendo fuertes repercusiones en los medios y esta vez fue Marina Calabró quien apoyó a Taboada y destacó su trabajo. Pero en medio de su descargo, Calabró reveló "sus maldades" en su pasado como panelista de Infama, clásico magazine conducido por Santiago Del Moro, y despertó la furia de Vanesa Carbone, mediática alejada de la televisión, que no se privó de lanzar un fuerte comunicado contra la columnista de Radio Mitre y Marcela Feudale, otrora compañeras en Infama.
El enojo se encendió cuando Calabró lanzó en Lanata sin filtro el siguiente comentario: "El equipo de Infama éramos muy camarilla. Santiago del Moro, Marcela Feudale y yo, para todos los que intentaron entrar fue complejo, excepto para Andrea Taboada. Es una profesional impecable que tiene gran adaptabilidad, porque si sobrevivió a ese equipo de Infama... Malísimas, con la Feudale éramos re-malas y Del Moro más malo que nosotras dos juntas". Tras su mea culpa, Carbone publicó un extenso descargo contra Marina y Marcela Feudale, con quienes compartió panel en el recordado programa y compartió su versión de la historia.
Publicado por Pronto, el descargo de Carbone -actualmente fuera de los medios y desarrollándose en el campo de la Criminología- fulmina a ambas figuras, dedicándoles feroces párrafos donde menciona las situaciones de maltrato que sufrió: "A mí me tocó padecer a Marina Calabró y a Marcela Feudale como compañera de Infama porque yo en un momento estuve trabajando con ellas, por suerte poco tiempo. (...) Antes de que yo me fuera, ya se sabía que mi contrato terminaba y que no se iba a renovar. Hubo muchos pedidos por parte de Marina a Santiago y a la producción y sus molestias constantes hacia mi persona. Lo sé porque me lo dijeron los productores. Incluso me dijeron 'ya vamos a tomar un café para charlar mejor y contarte bien', como que tenían ganas de contarme más cosas".
La denuncia por maltrato que salpica a Marcela Feudale
Sobre Marcela Feudale, actual "angelita" de LAM, Carbone disparó: "Después me acuerdo, por ejemplo, que Feudale pasaba al lado mío y me decía, 'te vas, te vas, tres meses cuatro meses y te vas', así en voz baja, como una especie de niña contenta de la primaria. Y después estaba el aire como el destrato constante de 'vos no sos periodista y como no sos periodista, entonces no tenés derecho a estar sentada como estamos sentadas nosotras'. Incluso cuando se renovó la escenografía del plató llegaron a decir 'nosotras no tenemos por qué estar sentadas con gente que no es periodista", con lo cual le pidieron a la producción estar sentadas ellas dos en el mismo piso que Santiago y que a las demás panelistas las sacaran, por lo cual nos la llevaron a todas las otras panelistas fuera del plató principal, a una banqueta".
"No eran cerradas, no eran difíciles, eran personas que con una abundancia de carencias y de grandes inseguridades, utilizaban como modus operandi el destrato hacia las mujeres nuevas que ingresaban en ese programa. Un jueguito perverso (...) Yo prefiero trabajar con mujeres, que a mí me inspiren y Marina Calabró y Marcela Feudale nunca me inspiraron absolutamente a nada. Bueno, sí, a no ser como ellas", cerró Carbone, indignada.