Un hombre de 41 años intentó asesinar a su ex pareja con un cuchillo en la pizzería Big Pizza, ubicada en la intersección de las calles Quesada y Cabildo del barrio porteño de Belgrano, pero no logró cometer el femicidio por la rápida intervención de sus compañeros, trabajadores del lugar. Luego, intentó quitarse la vida con un corte en el cuello. Según indicaron las autoridades, logró apuñalar -al menos- 28 veces a la empleada del local al grito de "¡mi hija no me quiere!".
En medio de los gritos y la desesperación, que alertó a vecinos y vecinas del barrio, intervino personal de la Comisaría Vecinal 13 B de la Policía de la Ciudad que se encontraba de recorrida por el lugar. "Al llegar, el oficial se encontró con un hombre discutiendo con una mujer, su expareja, quien estaba con heridas cortantes en abdomen, rostro y cuello, provocadas supuestamente por el imputado", indica el informe policial al que accedió El Destape.
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Según indicaron desde la fuerza porteña, "presuntamente el hombre intentó hablar con la mujer y ésta se habría negado, atacándola con el cuchillo". Al llegar los efectivos a dicha pizzería, el presunto femicida empezó a gritar que su hija no lo quería y que por eso se iba a matar, infligiéndose puntazos en el cuello. Rápidamente, indican, fue auxiliado por el oficial para parar el sangrado hasta que arribó una ambulancia del SAME que lo trasladó al hospital Pirovano.
"Cuando Adriana (la mujer atacada) sale corriendo se lleva el cuchillo, lo saca para afuera. Como no encontró con qué lesionarse, agarró un tramontina chico y con eso se da en el cuello cuando ve que está la policía y sabe que no se va a poder escapar", explicó uno de los testigos de lo ocurrido. Con respecto al ataque, dijo que "fueron un montón de puñaladas, claramente la intentó matar, pero no pudo darle bien y ella se defendió" mientras que quienes se encontraban en el lugar "le tiramos con todo lo que encontramos".
Marcelo aseguró, en C5N, que conoce a la mujer atacada, señaló que son vecinos y que ambos se compran mutuamente en sus respectivos locales. El hombre es el dueño de uno de los supermercados que hay en frente de la pizzería, llamado Valentina. "Dijo 'es el fin'", antes de apuñalarse a sí mismo.
Ambos fueron trasladados, con diversas heridas, al mismo establecimiento sanitario pero sin riesgo de vida. "Estaba próxima a ser dada de alta", manifestaron. Mientras que el agreso, luego de ser dado de alta, quedó detenido en la comisaría vecinal que intervino en el lugar del hecho.