Existe una ley, pero más del 70% de los argentinos no consigue talles en locales: por qué está "cajoneada" y qué pasa puertas adentro

A pesar de la Ley Nacional de Talles, la implementación de un sistema de talles en Argentina sigue sin concretarse, afectando a más del 70% de los argentinos que aún enfrentan dificultades para encontrar ropa adecuada.

27 de noviembre, 2024 | 00.05

La Ley Nacional de Talles (Ley 27.521) fue sancionada en 2019 y reglamentada en 2021 en Argentina. Su objetivo es establecer un sistema de identificación de talles de indumentaria que se ajuste a las medidas corporales promedio de los argentinos. Sin embargo, a pesar de la existencia de esta ley, los organismos del gobierno de Javier Milei mantienen la normativa cajoneada y su implementación todavía no se efectivizó. Más del 70% de los argentinos aún enfrentan dificultades para encontrar ropa adecuada.

Según supo El Destape, para su implementación el Instituto Nacional de Tecnología Industrial (INTI) debe presentar una propuesta de tabla de talles a la Dirección Nacional de Defensa del Consumidor, área encargada de la implementación, para que se convoque al Consejo Consultivo para definir la concreción del Sistema Único Normalizado de Identificación de Talles de Indumentaria (SUNITI). Esta tabla de talles es producto de los resultados del Estudio Antropométrico Argentino (EAAr), que ya se realizó y definió las medidas corporales de los argentinos en todas las regiones del país. Estos datos son la base que ajustará las tallas de ropa a la morfología real de los habitantes y unificará el criterio de la industria nacional.

Por qué no hay talles en Argentina a pesar de tener una ley: qué pasa puertas adentro

En este marco, existen versiones cruzadas sobre por qué todavía se encuentra frenada la ley aún con el estudio clave concretado. Desde la Defensa del Consumidor aseguraron que se encuentran esperando la propuesta de tabla de talles del Instituto Nacional de Tecnología Industrial (INTI) para proceder mientras que desde el INTI informaron que el trabajo ya “está en manos de dicha área, encargada de aplicar los resultados en una tabla de talles acorde a la realidad local. El Destape intentó consultar a Defensa del Consumidor sobre el estado del proceso, pero el área declinó hacer declaraciones. Este ida y vuelta entre áreas clave está demorando la implementación de la ley.

Mientras tanto, según una encuesta de AnyBody Argentina, más del 70% de los argentinos tienen dificultades para encontrar ropa de su talle. La encuesta se realizó en 2022 y participaron cerca de 7.000 personas. Algunos de los problemas que se encuentran en la búsqueda de ropa van desde la confección de las prendas cambió y lo que antes era un talle estándar puede variar de un local a otro; un mismo talle puede no ajustarse de la misma manera en distintas marcas o estilos y en muchos casos, los consumidores se ven obligados a pagar más por encontrar lo que buscan.

En diálogo con El Destape, Samanta Alonso, integrante de Anybody, organización involucrada en la temática, lamentó que la ley se encuentre frenada y enfatizó que están esperando ser convocados a la reunión consultiva para concretar el SUNITI. En este sentido, remarcó que desde la organización sostienen que "es importante seguir hablando de la temática, porque todos los años en nuestras encuestas se repite lo mismo: mas del 70% de los argentinos y argentinas no encuentra ropa y el impacto que genera sobre nuestro cuerpos".

"Mas del 70% afirma que solo consigue prendas en talle único, cuando en realidad la diversidad corporal existe, solo que el privilegio de vestirse y elegir lo tienen unas y unos pocos", remarcó haciendo referencia a los actuales talles que rigen en la Argentina que no condicen con las medidas corporales de las personas.

"Hay que reforzar que vestirse es un derecho y hasta incluso las personas, como consumidoras, necesitan conseguir talles y trato digno en los locales", cerró.

Qué dice la Ley

La normativa fue reglamentada el 9 de junio de 2021, y desde entonces el INTI tenía 240 días para presentar los resultados del EAAr, el censo corporal realizado con escáneres 3D que registra las medidas corporales en todas las regiones del país. Estos datos son esenciales para crear el SUNITI, que ajustará las tallas de indumentaria a la morfología real de los habitantes y unificará el criterio de la industria local, incluyendo ropa de trabajo y calzado. Finalizado el muestreo y establecida la nueva guía de medidas, que se actualizará cada diez años, las provincias y la Ciudad Autónoma de Buenos Aires deberán adaptar sus normativas según lo determinado por la Ley de Talles, sus reglamentaciones y normas complementarias.

Por qué no hay talles en Argentina a pesar de tener una ley: qué pasa puertas adentro

Actualmente, la industria se basa en sus propias tablas o en normas IRAM basadas en cuerpos europeos, lo que no contempla el cambio corporal de las sociedades. Esto no cumple con el derecho de las personas a vestirse con prendas acordes a su cuerpo. A finales de 2023 se habían elaborado los primeros bocetos de tablas de talles con varias opciones, pero tras el cambio de gobierno no hubo más novedades sobre el SUNITI. En julio se solicitó un informe al Poder Ejecutivo Nacional para resolver la reglamentación, pero hasta el momento no ha sido tratado.

Qué datos se obtuvieron del estudio

El estudio mostró que las mujeres argentinas tienen grandes diferencias con las medidas estandarizadas internacionales: una altura promedio de 1,61 metros frente a los 1,70 metros utilizados por las marcas internacionales. Las medidas promedio para otras partes del cuerpo son: busto (90-102 cm), cintura (74-86 cm) y cadera (102-105 cm). En los hombres, la altura promedio es de 173,8 cm, la cintura de 93 cm y la cadera de 103 cm. Estos resultados reflejan la diferencia entre las medidas promedio de los argentinos y los talles genéricos adoptados por la mayoría de los comercios, lo que genera dificultades al elegir ropa.

La investigación del INTI se realizó en más de 20 ciudades del país, con una muestra de 13.276 personas de todas las regiones, en edades de 12 años en adelante. Se utilizaron escáneres 3D, tecnología de última generación que captura aproximadamente 400 medidas de cada persona en solo 10 a 15 segundos, garantizando modelos 3D precisos y navegables para su análisis y medición. De las personas medidas, el 63,5% fueron mujeres y el 36,5% hombres. En términos socioeconómicos, el 60,6% pertenecían al nivel medio, el 32,2% al nivel bajo y el 2,7% al nivel alto. La muestra predominante fue de edades entre 20 y 49 años, representando el 70% del total.

Para analizar los datos, se emplearon pruebas estadísticas como la prueba de Kruskal-Wallis, que confirmaron diferencias estadísticamente significativas entre las regiones. Estas variaciones evidencian la necesidad de un sistema de talles que contemple la diversidad corporal dentro del país, asegurando que las prendas fabricadas sean adecuadas para la población de cada región.