El Observatorio "Ahora Que Sí Nos Ven" advirtió que hubo un femicidio cada 37 horas y se contabilizan un total de 78 asesinatos por la violencia machista en la Argentina durante los primeros cuatro meses del 2024 -entre el 1 de enero y el 30 de abril-. Además, especificaron que hubo 27 en enero, 26 en febrero, 12 en marzo y 13 en abril; mientras que registraron una mayor cantidad en las provincias de Buenos Aires -incluída CABA- (35), Santa Fe (7), Chaco y Mendoza (5) y Córdoba y Misiones (4).
De estos femicidios, se conoció que en el 80% de los casos la víctima tenía algún vínculo con el agresor (45% era la pareja; 23% ex pareja, 9% familiar y 3% conocido). Del 21% restante no pueden darse certezas o datos ya que no fueron registrados. Además, hubo 80 intentos de femicidios (72 intentos de femicidios y 8 intentos de femicidios vinculados) y 2 transfemicidios o travesticidios. "Es importante volver a remarcar que ese total se basa en lo que relevamos de los medios de comunicación, porque sabemos que en la realidad el total es mucho mayor", aclaran.
Por otra parte, el informe del Observatorio señala que el 61,6% de los femicidios ocurrieron dentro de la vivienda de la víctima o en la vivienda compartida, lo que demuestra que las mujeres y diversidades ni siquiera están seguras en sus propios domicilios. El 11,5% en la vía pública, el 6,4% en la casa del agresor y el 20,5% restante no tiene datos registrados. Además, un total de las 14 mujeres asesinadas (es decir, el 18%) hicieron al menos una denuncia previa y otras 7 tenían medidas judiciales o de protección (el 9%) contra sus agresores en curso.
Por la inoperancia y negligencia de la justicia, al menos 73 niños y niñas perdieron a sus madres -durante abril, fueron un total de 12-; mientras que cuatro de los femicidas pertenecen o formaron parte, en algún momento, de alguna fuerza de seguridad. "(Javier) Milei sigue negando las desigualdades de género, por eso hoy más que nunca tenemos que visibilizarlas", apuntaron.
"Nadie que se identifique como feminista y a favor de la igualdad puede acompañar las decisiones de este gobierno. Frente a este panorama las organizaciones feministas no bajamos los brazos y visibilizamos lo que otrxs quieren ocultar", concluyeron en el informe.
Crecen los ataques de Nación contra la problemática
En el 2023, según indicó el mismo observatorio, hubo un femicidio cada 28 horas y se contabilizaron un total de 308 asesinatos por violencia machista en la Argentina; mientras que cerca de 256 niños y niñas perdieron a sus madres debido a la problemática. Según datos de otras ONGs, como La Casa del Encuentro, se registraron 334 víctimas de femicidios y trans/travesticidios, mientras 416 hijos e hijas se quedaron sin madre (el 59% son menores de edad). Es decir, una víctima de violencia de género cada 26 horas. En este marco y frente a un gobierno que desestima la existencia de la violencia machista, el recorte y vaciamiento del RENNYA para a ser un nuevo ataque contra quienes ya sufrieron una tragedia y pérdida tan grande.
El programa Reparación económica para niños y/o adolescentes (RENNYA) -bajo la órbita de Capital Humano- se da en el marco de la Ley 27.452 o 'Ley Brisa', impulsada por la Casa del Encuentro después del femicidio de Diana Barrionuevo (2014) y en honor a la menor de sus tres hijos. Está especialmente destinada a hijos/as -también personas con discapacidad- de mujeres víctimas de femicidio u homicidio en contexto de violencia intrafamiliar y/o de género. Se implementa desde el 2018 y su objetivo es que dichas infancias y adolescencias reciban protección del Estado nacional para crecer en un ambiente "sano y libre de violencias"; además de acceder a una cobertura integral de salud y recibir acompañamiento durante la crianza y su desarrollo integral.
“En nuestro programa de alcance nacional éramos 18 personas, echaron a seis de ellas: a la única abogada del programa y a un compañero que tenía un Certificado Único de Discapacidad (CUD), por secuelas de un tumor. Al momento, sólo reincorporaron a este último compañero; el resto una abogada, una psicóloga, un administrativo y dos trabajadoras sociales... Seguimos afuera”, explicó Paula Farías, trabajadora del Programa en la sede central de la Ciudad de Buenos Aires (aunque, aclara, trabajaban con familias de todo el país), a El Destape.
Lógicamente, ante las bajas de contratos, toda la tarea que realizan se encuentra completamente frenada desde la llegada de la nueva gestión. “Al día de hoy, no tenemos funcionarios/as designados. Es una situación compleja explicar a familias, juzgados y defensorías, que nos preguntan de forma constante -principalmente a nuestros celulares personales, con los que trabajamos de manera remota durante la pandemia- por avances en sus expedientes... La respuesta empieza a ser cada vez más frustrante”, apuntó.
Cabe resaltar que la reparación económica puede ser cobrada directamente por el hijo/a -si tiene entre 18 y 21 años- o del adulto responsable que quede a cargo del menor de edad o de la persona con discapacidad (en este caso, sin límite de edad). "Desde el inicio de esta nueva gestión que nuestro programa se encuentra detenido, sin tareas; no porque no las haya, sino porque no contamos con las estructuras", explicó Farías. Entre ellos mencionó la ausencia de circuitos institucionales, falta de firmas autorizadas de funcionarios para llevar adelante tareas o indicaciones y temperamento a seguir en el Programa para actuar.
"Un cuadro de incertidumbre y acefalía preocupante, sumado a los lógicos reclamos de las distintas familias y organismos, respecto a la demora de sus expedientes y cobro de reparación en un contexto grave donde el costo de vida se torna cada vez más difícil en la población con la que trabajamos", añadió a este medio. Hasta el momento, según indica, la gestión de Milei no otorgó ninguna reparación económica; ni siquiera las que se encontraban en trámite previo a diciembre o las que entraron luego (muchas solicitudes quedaron trabadas en otras áreas, también golpeadas). "No demuestran ni la más mínima sensibilidad e interés respecto de las situaciones de violencia de género ni con las infancias y adolescencias vulneradas", concluyó.