Desde la llegada del presidente Javier Milei el país entró en una crisis económica que trajo como consecuencia el cierre de fábricas y empresas, la caída de consumo, los despidos masivos y la falta de generación de empleo.
En ese contexto, tras varias semanas de muchas idas y vueltas una histórica fábrica del Conurbano bonaerense cerrará su planta a partir del 1 de enero y 200 empleados podrían quedar en la calle.
Se trata de la planta de la empresa Dorada S.A que fabrica los productos de la popular marca Dánica y que pertenece al Grupo Beltran. Pese a los reclamos de los trabajadores, la planta de Llavallol tendrá su último día de producción el 31 de diciembre. La fábrica está en funcionamiento hace 85 años siendo un ícono en la región y el país.
Los empleados explicaron que desde que los dueños adquirieron la planta hubo conflictos todos los años y relataron que en octubre abrieron retiros voluntarios y empezaron a cerrar las cámaras. Los trabajadores de Dánica también denunciaron que van a abrir una planta en Córdoba con menores gastos y con otros convenios, lo que significaría sueldos más bajos.
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El cierre de Dánica no tiene vuelta atrás
Al vaciamiento de la fábrica se sumó que la empresa decretó vacaciones obligatorias a partir de diciembre dejando sin actividad a la planta de Lomas de Zamora para que el 1 de enero esté completamente cerrada.
"Estamos sin laburar desde el 29 de noviembre. Nos pagaron el mes de diciembre en forma de vacaciones y una suspensión con goce de sueldo. Ahora estamos viendo si nos pagan la indemnización, porque querían pagar el 50 por ciento. Ahora ofrecen el 100 pero en muchas cuotas", comentó un trabajador de la fábrica al portal La Unión.
En esa línea, respecto del cierre, agregó: "El área de producción está casi parada desde junio. Sólo hacían aceite para Córdoba, y ahí empezaron a fabricar los productos. Y ahora ya decidieron cerrar. Nosotros pensábamos que iba a llegar diciembre y nos iban a proponer algún acuerdo, pero nada".
"El presente de los aceiteros no es de los mejores, pero tampoco es malo. Las grandes empresas y multinacionales siguen ganando fortunas, aunque haya una baja de consumo, siguen ganando. Siempre que vienen estos Gobiernos de extrema derecha los trabajadores son los que más sufrimos", criticó en charla con el medio AN Digital, el secretario gremial de la Federación de Trabajadores Aceiteros, Ezequiel Roldán.
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