Nació en Montevideo, Uruguay, en 1919. Es considerado uno de los mayores dibujantes de la historieta mundial. Siendo un niño, su familia se trasladó a Buenos Aires, afincándose en el barrio de Mataderos. Dio sus primeros pasos en las revistas de la Editorial Láinez, donde se hizo cargo de series como «El Vengador» (para la revista El Gorrión) «La hostería solitaria» o «Kid del río grande» (para Tit-Bits). En 1946, comenzó a colaborar en la revista Patoruzito con la serie de «Jean de la Martinica” y dos años después fue elegido para continuar la exitosa serie del detective criollo «Vito Nervio», creación de Mirco Repetto y Emilio Cortinas, ya con guiones de Leonardo A. Wadel. Su primer salto de estilo se dio con la historieta «Sherlock Time», en lo que fue su primera colaboración con Héctor G. Oesterheld en guión, para la revista Hora Cero Semanal. Años después, también con Oesterheld, realizó para la revista Misterix «Mort Cinder», que es considerada seminal en la historia de la historieta mundial y cuya influencia puede rastrearse hasta nuestros días.
Otros trabajos de importancia fueron sus colaboraciones para la editorial inglesa Fleetway, la segunda versión de «El Eternauta» (publicada originalmente en la revista Gente y que cuenta la colaboración de su hijo Enrique), «La vida del Che» –trabajo en conjunto con su hijo Enrique Breccia y guión de Oesterheld– «Los mitos de Cthulhu» con adaptaciones de Norberto Buscaglia, «Un tal Daneri», con Carlos Trillo, «Drácula, Dracul, Blad, Bah…» y «Perramus» con guiones de Juan Sasturain. En 1973, recibió el prestigioso premio Yellow Kid en Lucca, Italia, por su trayectoria profesional. Falleció en Buenos Aires en 1993.