La Cámara Federal de Mendoza ordenó exhortar a Venezuela para que informe vía diplomática el paradero del gendarme argentino Nahuel Gallo a partir de un habeas corpus presentado por la Gendarmería. Por su parte, el ex embajador en Venezuela (2022-2023) y ex presidente del Parlasur Oscar Laborde también intervino en el caso para contactar a la familia y con las autoridades venezolanas. Explicó que el viaje debió ser autorizado y puso en duda las razones por las que llegó a ese país sudamericano.
Gallo fue detenido el 8 de diciembre pasado cuando cruzaba la frontera entre Colombia y Venezuela por el paso Francisco de Paula Santander. Iba en taxi con un conductor que, supuestamente, había contratado su esposa María Gómez que lo esperaba en Caracas junto al hijo que tienen en común. Fue a través de ella que se supo de la detención del hombre de la Gendarmería Nacional que el Gobierno de Nicolás Maduro acusó de ser parte de un grupo de los “servicios de inteligencia” argentinos enviado para “liberar” a los opositores antichavistas asilados en la embajada argentina en Caracas.
La Cámara Federal de Mendoza –a cargo de los jueces Manuel Pizzaro, Gustavo Castiñeira de Dios y Juan Ignacio Pérez Curci- hizo lugar a un habeas corpus presentado en favor de Gallo por la Gendarmería Nacional, a cargo de Claudio Miguel Brilloni: “Se ha privado de la libertad a un ciudadano argentino desconociendo por el momento los motivos de la misma [por la detención] y cuál ha sido la autoridad competente que la ha ordenado, contraviniendo palmariamente la ley”, dice el fallo, según pudo constatar el diario La Nación.
Por esa razón, los camaristas ordenaron “exhortar” a Venezuela a que, a través de las autoridades correspondientes, informen de modo inmediato el paradero de Nahuel Agustín Gallo, los motivos de su detención y a disposición de qué autoridad judicial competente se encuentra.
Asimismo, dispusieron “instar a las autoridades judiciales de la República Bolivariana de Venezuela a presentar física o telemáticamente al Sr. Nahuel Agustín Gallo” ante las autoridades que designe la Cancillería “con el fin de ser asesorado” y que se le facilite el contacto con sus familiares. También ordenaron que se forme una causa penal y que ese expediente se le remita a la fiscalía para determinar la posible comisión del delito de “desaparición forzada de personas” en perjuicio del Sr. Nahuel Agustín Gallo.
Los jueces también entendieron la “gravedad” de la situación a propósito de la falta de relaciones diplomáticas entre los dos países, que rompieron sus vínculos luego de las elecciones del pasado 28 de julio, cuando el Ejecutivo argentino desconoció las elecciones nacionales que –según la Cámara Nacional Electoral venezolana- dieron como ganador a Nicolás Maduro. Esto, advirtieron, “ha representado un obstáculo significativo para la obtención de información directa y verificable sobre la situación del ciudadano argentino”.
La intervención de Laborde
El ex embajador de Argentina en Venezuela reconoció que intercedió ante las autoridades venezolanas para hacerle llegar a Gallo una carta escrita por sus familiares. “Hubo un acercamiento de una persona allegada a la madre del gendarme, me preguntó si podía hacerle llegar una carta y se hizo la gestión, solamente por una cuestión humanitaria”, relató en declaraciones radiales Laborde, quien es además ex presidente del Parlasur y habitual columnista de Tiempo Argentino.
En una entrevista con IP Noticias, contó también que se contactó con la fiscalía venezolana: “Hablé con la fiscalía, al haber estado allá quedó vinculación con todos los poderes. A mí me queda satisfizo la explicación que yo le di y con quien hablé a la madre”, señaló.
En tanto, en entrevista con El Destape 1070 explicó que por más de que el gendarme haya estado de licencia, es cierto que ese viaje debió haber sido autorizado “por alguien”, tal como también señaló la vicepresidenta, Victoria Villarruel: “Lo que tiene que responder Patricia Bullrich es quién autorizó al gendarme. Un gendarme o un militar o un prefecto, aunque salga de licencia tiene que pedir permiso. No lo hizo (no pidió permiso) o no lo sabemos. Hay que avisar a los países a los que se va, que está concurriendo un gendarme, aunque esté de licencia”, apuntó. Incluso, especificó que en Migraciones cuando un militar sale de un país tiene que justificar para dónde va. Y que cuando entra a otro país se tiene que enviar una carta previamente: "Eso no se hizo", aseguró.
MÁS INFO
Por otro lado, también hizo referencia a una decisión que la ministra de seguridad había anunciado a principio de año cuando seis personas de la oposición se asilaron en la embajada argentina en Caracas. Se trata del envío de gendarmes a la capital venezolana “para que cuidar de todos los opositores”, así lo manifestó Bullrich en marzo. “¿Este será uno de ellos, habrá más?”, se preguntó Laborde.
Las relaciones diplomáticas entre Argentina y Venezuela están rotas desde agosto, luego de las elecciones del 28 de julio pasado celebradas en el país latinoamericano bajo fuertes cuestionamientos de la oposición y de parte de la comunidad internacional que decidieron no reconocer los resultados por la falta de transparencia en el escrutinio. Eso llevó a la decisión de que Venezuela rompiera vínculos con los distintos países que no reconocieron como electo a Maduro y que los intereses de la Argentina pasaran a estar resguardados por Brasil.