El conjunto de estudiantes y docentes de las universidades públicas de toda la Argentina se movilizarán, este miércoles 2 de octubre, en defensa de la Ley de Financiamiento Universitario. La marcha fue convocada como respuesta al anuncio del presidente Javier Milei, quien anticipó su intención de vetar el proyecto de ley aprobado por el Congreso de presupuesto universitario, lo que generó una respuesta contundente por parte de la comunidad universitaria.
La Ley de Financiamiento Universitario, aprobada el pasado 12 de septiembre en el Senado con 57 votos a favor, 10 en contra y una abstención, establece una recomposición salarial para el personal docente y no docente desde diciembre de 2023. Según la Oficina de Presupuesto del Congreso, su implementación supondría un impacto equivalente al 0,14% del Producto Bruto Interno (PBI), aproximadamente $738.595 millones.
Sin embargo, Milei expresó su rechazo a la ley y anunció en sus redes sociales que ejercerá un veto total, para lo cual tiene tiempo hasta el 3 de octubre. Lo mismo manifestó el vocero presidencial Manuel Adorni, quien no solamente insistió con que el Gobierno vetará el proyecto, sino que además chicaneó diciendo que “llamativamente hay un 38,4% de alumnos inscriptos que no se sabe qué hacen en la facultad". Además, afirmó que “no es justo que una familia que se encuentra bajo la línea de la pobreza subsidie a quienes van a hacer política a la universidad”.
Marcha Federal Universitaria: horarios y lugar de concentración
La movilización bajo el lema "La Universidad no es el problema, es parte de la solución", se llevará a cabo en la Plaza del Congreso, comenzando a las 17 horas en la intersección de las avenidas Callao y Rivadavia. La Federación Universitaria Argentina (FUA), junto con gremios y el Consejo Interuniversitario Nacional (CIN), convocaron a esta marcha, cuyo objetivo es defender el financiamiento de las universidades públicas y rechazar las políticas que podrían afectar su funcionamiento y calidad educativa.
Entre las consignas de la manifestación, los organizadores destacan su rechazo a los recortes presupuestarios, la privatización de servicios y la eliminación de programas de becas, los cuales consideran fundamentales para garantizar el acceso a la educación pública de calidad. Además, esta protesta será una reedición de la masiva movilización realizada el 23 de abril, cuando miles de personas se reunieron en las calles para defender el valor de la educación superior pública y gratuita en Argentina.
Desde abril hasta octubre, las universidades mantuvieron negociaciones con el gobierno en torno al financiamiento, pero los avances han sido limitados. Víctor Moriñigo, presidente del CIN, advirtió que el presupuesto 2025 podría implicar una mayor pérdida salarial para los docentes y trabajadores universitarios en comparación con 2024. Para Moriñigo, el problema no es el financiamiento, sino "las prioridades del gobierno actual".
Finalmente, la movilización también tendrá un impacto en el tránsito de la ciudad de Buenos Aires, especialmente en las inmediaciones del Congreso. El gobierno porteño ha dispuesto un operativo de prevención para evitar cortes de calles, mientras que el Ministerio de Espacio Público e Higiene Urbana removerá 120 contenedores de basura en la zona, con el objetivo de prevenir incidentes durante la protesta.