Nuevamente a la calle. Este miércoles 2 de octubre de 2024 se llevará a cabo una masiva marcha en defensa de la educación pública en Argentina. Estudiantes, docentes y gremios se reunirán a las 17 frente al Congreso de la Nación, en lo que será la segunda manifestación del año, con el objetivo de reclamar mayor financiamiento y recursos para el sistema educativo.
También habrá movilizaciones en diferentes puntos del país, buscando visibilizar el rechazo a las políticas del Gobierno, que incluyen un veto a la ley de financiamiento aprobada por el Congreso.
Un contexto complejo para la educación pública
Diversos actores de la comunidad educativa, desde los docentes hasta los estudiantes, han emitido comunicados en los que describen la situación como crítica. Señalan que están enfrentando el mayor atraso salarial de la historia reciente y denuncian el recorte presupuestario anunciado para 2025. Entre las medidas más preocupantes, destacan el cierre de programas y la suspensión de becas para estudiantes, todo esto en un contexto de ajustes en servicios públicos, transporte y alimentos que han afectado gravemente a la población en los últimos meses.
¿Quiénes adhirieron a la movilización?
La convocatoria a la marcha ha sido realizada por diversas organizaciones. Los rectores de las universidades públicas, agrupados en el Consejo Interuniversitario Nacional (CIN), junto con los sindicatos que representan a docentes y no docentes, y la Federación Universitaria Argentina (FUA) lideran la movilización. A esta protesta también se sumaron importantes actores como la CGT, las dos CTA, la UTEP, partidos de izquierda y una fracción del radicalismo.
Se espera que la columna principal de la Universidad de Buenos Aires (UBA) parta desde Plaza Houssay a las 14, recorriendo Avenida Córdoba y Callao hasta llegar al Congreso. Además, se anticipa la llegada de manifestantes desde distintos puntos de la Ciudad de Buenos Aires y el país, lo que probablemente generará cortes en avenidas como Rivadavia y Avenida de Mayo, afectando el tránsito hasta la 9 de Julio.
¿Cuál es el conflicto?
El principal motivo de la marcha es el rechazo al veto presidencial a la Ley de Financiamiento Universitario. Esta normativa buscaba recomponer los salarios del personal docente y no docente desde diciembre de 2023. Según la Oficina de Presupuesto del Congreso, la implementación de la ley representaría un impacto presupuestario de $738.595 millones, equivalentes al 0,14% del PBI. Sin embargo, el presidente Milei ya confirmó su decisión de vetarla, argumentando la necesidad de mantener el equilibrio fiscal.
A pesar de las manifestaciones, el Gobierno ha asegurado que se mantienen en diálogo con las universidades y que han cumplido con las partidas presupuestarias acordadas. No obstante, los sindicatos denuncian que, además de haber perdido un 50% de poder adquisitivo frente a la inflación, sus salarios están un 20% por debajo del promedio del sector público, lo que ha intensificado el malestar.