Mercosur, China y EE.UU, la agenda internacional de Alberto Fernández

Alberto Fernández iniciará su agenda internacional del año con un viaje a Chile, el 26 y 27 de enero. En un panorama colocado entre paréntesis por la pandemia, las expectativas están puestas en la posibilidad de una bilateral con Joe Biden y en la visita a China, prevista para mayo. 

16 de enero, 2021 | 19.00

Alberto Fernández viene planeando desde antes de asumir un viaje a Santiago de Chile para reunirse con Sebastián Piñera, un presidente con quien no tiene afinidad ideológica pero sí una buena relación vía teléfono, gestada en conversaciones con telón de crisis de fondo. Luego de varios aplazos, el encuentro se concretará finalmente el próximo 26 y 27 de enero. Será el inicio de la agenda internacional de un año que se va reescribiendo sobre la marcha debido al recrudecimiento de la pandemia. Después del reciente altercado por las importaciones de trigo, el embajador Daniel Scioli trabaja en la posibilidad de un encuentro personal entre Fernández y Jair Bolsonaro, que sería en marzo en San Pablo, aunque en Cancillería lo ponen en duda. También trajina el embajador en Washington, Jorge Argüello, para conseguir una bilateral con Joe Biden, con quien Fernández se encontrará de todas maneras en la Cumbre de las Américas, postergada para la segunda parte del año. En mayo está previsto el viaje a China y en junio la cumbre del Mercosur con la que Argentina cerrará su presidencia pro témpore. Qué iniciativas se podrán concretar, eso quedará atado a la evolución de los contagios.

La agenda internacional de Alberto Fernández 

Chile

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Fernández amagó con viajar a Chile luego de ser electo, como un gesto hacia Piñera en medio de la crisis por las protestas sociales. No se dio. Tampoco vino Piñera a su asunción porque ese día un avión militar chileno tuvo un accidente. Al tiempo comenzó la cuarentena, que generó momentos de tensión bilateral. Por ejemplo, cuando Fernández comparó las estadísticas locales de contagios con los del país vecino, que obligó luego a una aclaración. Pero los presidentes siempre mantuvieron el buen trato personal y el argentino siempre quiso cumplir con aquella promesa de viaje, que se terminó de definir este mes. Originalmente iba a ser el lunes próximo, pero un colaborador de Piñera dio positivo de coronavirus, lo que obligó a una nueva postergación. Parece maleficio.

A través de la Cancillería que encabeza Felipe Solá y de la labor del embajador Rafael Bielsa se armó una agenda de visita de Estado que comprende una reunión a solas de los presidentes, una visita al Congreso y otra al Poder Judicial. Pero Fernández también consiguió intercalar un par de gestos distintivos: hará una homenaje en el monumento que recuerda a Salvador Allende frente a La Moneda y compartirá una cena con destacados dirigentes de la oposición, entre los que estará su amigo Marco Enriquez-Ominami. Con diferencias acerca de qué rumbo debe tomar la región, Fernández y Piñera centrarán la visita en los acuerdos comerciales y de cooperación. En un momento cargado de incertidumbres, en ambas cancillerías consideran positivo esta foto entre dos presidentes con distintas miradas pero moderados.

Brasil

Después de la tensión generada entre Brasil y Argentina por el trigo, Scioli avisó que trabajaría para que al fin Fernández y Bolsonaro se conozcan personalmente. Dijo ver una oportunidad en la cumbre empresarial que se hará en marzo en San Pablo, pero en la Cancillería lo veían improbable dada la situación sanitaria en Brasil. Lo mismo acerca de la posibilidad de armar algo presencial para celebrar los 30 años del Mercosur, que se cumplirán el 26 de marzo. Obviamente, son más optimistas respecto a la organización de la cumbre regional prevista para junio, cuando Fernández traspase la presidencia pro témpore justamente a Bolsonaro.

Medio Oriente

El Presidente tiene pendiente un viaje de búsqueda de inversiones a países de Medio Oriente. En principio tocará Emiratos Arabes, Qatar y Arabia Saudita. Está todo coordinado, sólo falta encontrar un momento en que resulte seguro. Con todo, el mayor interés está centrado en la posibilidad de visitar las dos grandes potencias mundiales, China y Estados Unidos. Lo de China se iba a dar antes de fin de año, pero se postergó por la pandemia. La nueva fecha prevista es mayo, confirmada luego del último llamado entre Fernández y Xi Jinping que se prolongó en un amistoso intercambio de cartas. El contacto le abrió las puertas a la llegada de un millón de las vacunas que produce el laboratorio público chino Sinopharm, que se esperan para fin de mes. En Gobierno esperan esta visita como uno de los eventos del año en el rubro internacional. Abarcará no sólo Beijing sino también Shangai, con varias oportunidades de negocios para empresarios argentinos.

Estados Unidos

En cuanto a Estados Unidos, todavía está todo en condicional hasta la asunción de Biden, la semana que viene. Los especialistas en política internacional coinciden en ubicar a Fernández como un líder regional con buenas perspectivas de convertirse en interlocutor privilegiado de Washington. En principio, se trabaja para conseguir una reunión bilateral antes de mitad de año, tal vez luego de la firma del acuerdo con el FMI. De no ser posible, la chance más segura es la de un encuentro durante la Cumbre de las Américas, que justamente se hará en Estados Unidos. Biden dio instrucciones de que quiere que sea presencial, así que ya se pasó de abril para alguna fecha del segundo semestre. Hace rato que América Latina no figura dentro de las prioridades del Norte, pero cada presidente estadunidense que asume siempre trata de arrancar con un gesto de buena voluntad. Habrá que ver qué le toca esta vez a Argentina.

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Fernando Cibeira

Trabaja como periodista desde hace 30 años. Luego de recibirse la escuela de periodismo TEA, comenzó como colaborador en la revista Somos. Hizo la beca de perfeccionamiento periodístico del diario Clarín, donde luego fue redactor de Política durante seis años. A principios de 1998, se fue para participar de la efímera experiencia del primer diario Perfil. Antes de que termine ese mismo año ingresó a Página/12. Trabajó allí 22 años, durante los que le tocó cubrir numerosos actos, campañas electorales y viajes presidenciales. Fue redactor, editor y, finalmente, jefe de la sección Política, hasta su incorporación a El Destape.

En televisión condujo durante diez años el programa “Colores Primarios”, que se emitió por varias señales de cable.

En El Destape Radio participa del programa de Roberto Navarro y conduce “El Especial de los Sábados”.

Escribió “Macristocracia, la historia de las familias que gobiernan la Argentina” (Planeta).