El dirigente de la Sociedad Argentina de Terapia Intensiva, Arnaldo Dubin, afirmó que la ocupación de camas es cercana al 90 por ciento en hospitales públicos y privados de la Ciudad de Buenos Aires y del Conurbano bonaerense. Además, alertó que "están incluyendo camas que no son de terapia intensiva para dar el número de ocupación".
De esta forma, el especialista cruzó al Gobierno porteño que señaló que la ocupación de camas de terapia intensiva en la Ciudad está estable. "Lamentablemente no puedo compartir la opinión de que la ocupación de camas de terapia intensiva en la ciudad está estable".
En diálogo con El Destape Radio, el Jefe de terapia del Sanatorio Otamendi destacó que "esta discusión sobre las camas libres me tiene francamente agotado. El cuello de botella es el personal sanitario".
"Tengo miedo cuando voy a trabajar a terapia intensiva. Tengo riesgo de morirme", confesó.
El dirigente expresó que otro problema se encuentra en los médicos de terapia intensiva y los kinesiólogos. "Estamos agotados, ya éramos pocos antes de la pandemia y estamos sometidos a una carga de trabajo brutal", destacó. Asimismo señaló: "Que vayan a darle vacaciones a los intensivistas es una expresión de deseo sin visos de realidad. Estamos ya saturados".
Asimismo agregó que "estamos exhaustos y al límite de cometer errores", focalizó en que "la letalidad está aumentando y particularmente en CABA. Está arriba del 2,4% cuando se partió abajo de 2%" y ponderó que "el colapso del sistema no es el número de camas".
"Categóricamente le puedo decir a Larreta y Santilli que tenemos casi 1.550 contagios por día", destacó. Además señaló que "si el 5% de los pacientes necesitan terapia intensiva para sobrevivir tendremos 400 ingresos en una semana y su salida no es rápida".
Ante las cifras de contagiados, el dirigente afirmó que "hay que disminuir el número de casos. Aunque tengamos una meseta los números son muy altos". Destacó también que "las escenas en CABA con la gente que va a los bares nos muestra que el comportamiento no es adecuado" y agregó que "versiones edulcoradas de la situación, falsas impresiones de que el sistema de salud es robusto, no hacen bien".