Mientras en el país transita el quinto día de confinamiento estricto por el avance del coronavirus, los y las especialistas de la salud y los gobiernos analizan el número de contagios por día y la ocupación de las camas de Terapia Intensiva. Las diferencias entre la primera ola de COVID-19 de agosto del año pasado y la segunda, que se está transitando, tiene cifras alentadoras y otras que señalan que los cuidados y el confinamiento son algunas de las medidas más efectivas para combatir al coronavirus.
Actualmente y términos de contagios, la última semana epidemiológica de la provincia de Buenos Aires mostró las cifras más altas desde que la pandemia llegó a la Argentina. En la semana del 17 al 23 de mayo el total de casos promedió los 12.008 contagios por día siendo, tensionando al máximo al sistema sanitario.
En cambio, en los 40 distritos del Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA) los números, si bien volvieron a subir, no son los más altos. Actualmente el promedio es de 8.467 mientras que el pico en el AMBA fue, hasta el momento, la semana del 12 al 18 de abril donde los contagios llegaron a los 9.838. En el interior bonaerense la tendencia desde hace un mes es ascendente. El 26 de abril los casos era 1.786 y ahora se duplicaron: son 3.512.
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En cambio, en la primera ola de agosto de 2020 el promedio de casos por día en todo el territorio bonaerense fue de 5.845. Actualmente los números crecieron un 205% más. Las cifras mencionadas anteriormente fueron uno de los factores principales que el gobierno bonaerense detalló al gobierno Nacional para tomar las restrictivas medidas que regirán hasta el domingo próximo.
Nuevas cepas
¿Por qué crecieron tan abruptamente los casos en la provincia de Buenos Aires? Si bien, a mayor circulación aumentan los casos, la aparición de nuevas cepas fue otro de los factores predominantes.
Al respecto, el gobernador Axel Kicillof afirmo que “esta segunda ola es un nuevo virus modificado, cuyas características es mucho más contagioso”. De esta manera, explicó que la variante inglesa “tiene una transmisión entre el 30% y 90% mayor”, mientras que la de Manaos “tiene una transmisión de entre 40% y 160% más”. Es decir, “se triplicó la velocidad de contagio”, expresó el mandatario.
En las últimas dos semanas el 46,5% del ingreso de personas a Unidades de Terapia Intensiva (UTI) corresponde a menores de 60 años. “Hoy tenemos 246 menores de 14 años en hospitales”, sentenció Axel Kicillof el viernes pasado en la conferencia de prensa que brindó en Casa de Gobierno.
La vacuna es la libertad
En la primera ola de coronavirus, una de las noticias constantes eran la cantidad de médicos y médicas que contraían la enfermedad. Así como también la cantidad de fallecidos y fallecidas del mismo sector. Fueron y son la primera línea de batalla y en agosto del año pasado, del total de las personas contagiadas, el 4,5% fue personal del sistema de salud.
En el rebrote del verano, con la campaña de vacunación avanzando firme pero lentamente, la cifra cayó por debajo del 50%: representaban el 2,1% de los contagios totales. En cambio, los últimos datos del ministerio de Salud provincial mostraron números alentadores. Al mes de mayo y en plena transición de la segunda ola, con un sistema de salud al borde del colapso, los y las médicas bonaerenses no son noticia por contagiarse ya que sólo representan el 0,4% del total. Esto permitió que la atención en los hospitales no cayera y pudiera sostenerse.
La tasa de letalidad, es decir, el porcentaje de las personas fallecidas sobre las contagiadas bajó casi a la mitad en la segunda ola en comparación con la primera ola. El ministerio de Salud provincial realizó un cruce de datos respecto de la primera ola, tomada entre el 1 de julio al 30 de septiembre de 2020, con la segunda ola en la que se hizo un corte entre entre el 21 de marzo al 25 de abril del corriente.
Mientras que en los tres meses del año pasado la tasa de letalidad llegó a ser del 5% y bajó al 3,5% cuando ya la cantidad de pacientes internados era menor, en 2021 la tasa no llegó al 3% en marzo y se ubica en el 1,9% para fines de abril.
Actualmente ya se aplicaron 4.401.521 vacunas, de las cuales 3.498.155 son primeras dosis y 903.366 segundas. En ese sentido, el personal de salud está en un 95,45%, es decir que ya se inocularon a 401.485 de los 420.604 anotados y anotadas. Restan 19.119 personas.
El 88,42% de las personas mayores de 60 años también fue vacunada. De las 2.604.774 anotadas ya inmunizaron a 2.303.115, restando 301.659. Las personas de entre 50 a 59 con enfermedades de base están en un 65,93%. Fueron vacunadas 332.168 de las 503.805.
El personal docente y no docente avanza un poco más lento. De los 457.002 maestros y maestras fueron inoculados 232.211, es decir el 50,81%. En tanto, el personal de seguridad está en un 33,38%: 44.294 agentes fueron inmunizados y restan 88.404.
Finalmente, el fortalecimiento en el sistema de salud, en el cual se le incorporaron más de 500 nuevas camas, generó que, aún con números elevadísimos el porcentaje de camas UTI promediara entre el 73% y 77% y no colapsara.
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