El fin de las rejas en Plaza de Mayo ya generó la algarabía de los militantes en la previa a la asunción del presidente electo, Alberto Fernández. El operativo consensuado con el Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires terminó con la separación de Casa Rosada con la ciudadanía.
Un grupo de personas que se encontraba en el centro cívico comenzó a cantar la marcha peronista mientras removían las últimas estructuras que cercaban la plaza. Mañana se espera una multitud para celebrar la llegada del nuevo gobierno.
Las tareas de remoción de las rejas comenzaron a última hora del domingo. Después de doce horas de trabajo este mediodía ya no estaban y en la Plaza de Mayo ya se encontraba armado el gran escenario de 50 metros para la fiesta de mañana, montado sobre 54 andamios y con cinco pantallas led.
Al costado de la plaza también se levantan torres de andamios – dos junto a Hipólito Yrigoyen y otras dos junto a la Rivadavia, además de una quinta torre frente al Cabildo - con pantallas que replicarán lo que suceda frente a la Casa de Gobierno.