Tras la polémica contratación de un abogado del Gobierno, el presidente de la Corte Suprema de Justicia, Carlos Rosenkrantz, volvió a mostrarse cercano a Cambiemos con una nueva maniobra. Esta vez fue la designación de un empleado de AFIP en la máxima autoridad judicial, según pudo averiguar El Destape.
La resolución firmada por Rosenkrantz autorizó la contratación de Mariano Braccia, quien hasta el momento se desempeñó en el órgano regulatorio de los ingresos públicos. Las dudas alrededor del nombramiento surgen a partir de que actores políticos cercanos al círculo de Mauricio Macri están sospechados en causas relacionadas a delitos tributarios.
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En ese contexto, la inclusión de Braccia podría estar conectada a la interferencia en estos asuntos que preocupan al Gobierno.
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Desde el entorno del presidente de la Corte pretenden eludir las versiones sobre la influencia del Ejecutivo y aseguran que Rosenkrantz dialogó con distintas personas para ocupar el cargo.
Sin embargo, fue Braccia quien mostró mejor perfil en el área de derecho tributario. Desde este punto de vista, el nivel de su currículum –formado en la UBA y en universidades del exterior– deslumbró al líder del máximo tribunal del país.
No es la primera vez que Rosenkrantz actúa de esta manera. Hace un mes, El Destape reveló que había contratado a Juan Pablo Lahitou, exsubprocurador del Tesoro. No fue un traslado menor, ya que, al ejercer esa función, formó parte del equipo de Bernardo Saravia Frías como jefes de los abogados del Estado reconvertidos en abogados personales de Macri.
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