El jefe de la ONU para cuestiones humanitarias, Martin Griffiths, dijo hoy en Israel que habló con familias palestinas de la Franja de Gaza y que se encuentran en una situación devastadora ante los bombardeos lanzados por Israel desde los ataques de Hamas de este mes.
El secretario general adjunto de Asuntos Humanitarios de Naciones Unidas llegó a Israel luego de que el Gobierno israelí diera marcha atrás en su intención de no dar visa a funcionarios de la ONU críticos de sus operaciones militares en Gaza, incluyendo al propio Griffiths.
Antes de abordar con autoridades israelíes y palestinas la actual escalada, Griffiths dijo que tuvo la oportunidad de hablar por teléfono con algunas de estas familias de Gaza afectadas por los ataques de Israel.
Este contenido se hizo gracias al apoyo de la comunidad de El Destape. Sumate. Sigamos haciendo historia.
"He tenido el triste privilegio de hablar con varias familias de Gaza por teléfono. Lo que han tenido que soportar desde el 7 de octubre va más allá de lo devastador", escribió en su cuenta de la red social X, antes conocida como Twitter.
"No queremos morir", dijeron los palestinos con los que habló, contó el funcionario.
Y cuando una niña de 8 años te dice que no quiere morir, es difícil no sentirse impotente, agregó.
Milicianos del movimiento islamista palestino Hamas se infiltraron en Israel desde Gaza el 7 de octubre, mataron a más de 1.400 personas y secuestraron a unas 230, entre ellas una veintena de nacionalidad argentina.
En respuesta, Israel lanzó una campaña de bombardeos diarios en Gaza que dejó más de 8.300 palestinos muertos.
Griffiths dijo ayer que su petición a las partes enfrentadas era "liberar a los rehenes, proteger a los civiles allá donde estén, permitir la entrega rápida, segura y en la cantidad adecuada de ayuda humanitaria y respetar el derecho internacional humanitario".
La visita de Griffiths llega días después de que las autoridades de Israel afirmaran que denegarían la entrega de visados a representantes de Naciones Unidas tras críticas a su ofensiva en Gaza del secretario general del organismo, António Guterres.
Guterres dijo la semana pasada que los "horribles" ataques de Hamas "no surgieron de la nada", sino de casi 60 años de ocupación militar e ilegal de Israel de territorios que los palestinos reclaman para fundar su Estado.
El embajador de Israel ante la ONU, Gilad Erdan, acusó a Guterres de justificar una masacre, pidió su renuncia y dijo que Israel se negaría a otorgar visas a representantes de la ONU.
Guterres ratificó luego sus comentarios y dijo que había sido tergiversado.
Ayer, la embajadora de Israel ante las instituciones de la ONU en Ginebra, Meirav Eilon Shahar, dijo que su país nunca dijo de manera inequívoca que no daría visas a funcionarios de la ONU.
No hemos dicho categóricamente que no otorgaremos visas. Estamos... Entendemos su necesidad de estar ahí, dijo.
Eilon Shahar confirmó que Griffiths estaba en Israel, así como otros funcionarios de la ONU, incluido Hans Kluge, jefe regional de la Organización Mundial de la Salud (OMS), el organismo de salud de Naciones Unidas.
La embajadora, no obstante, continuó expresando la frustración de Israel porque los jefes de instituciones de la ONU no se hayan pronunciado con más fuerza contra Hamas por masacrar a civiles y mujeres de una manera tan cruel.
"Las Naciones Unidas han decepcionado al pueblo de Israel", añadió Eilon Shahar.
Con información de Télam