Putin admite que la guerra en Ucrania se hizo "larga" pero descartó enviar más reservistas

07 de diciembre, 2022 | 16.13

El presidente ruso, Vladimir Putin, admitió hoy que la intervención militar que lanzó en Ucrania hace más de nueve meses se hizo "larga", a la vez que descartó el envío de más reservistas y aseguró que Rusia se "defenderá" pero solo usaría el arma nuclear en respuesta a un ataque.

"No nos hemos vuelto locos, sabemos lo que son las armas nucleares", declaró hoy Putin en una reunión televisada con el Consejo de Derechos Humanos ruso del Kremlin, recogió la agencia de noticias AFP.

"Consideramos las armas de destrucción masiva, el arma nuclear, como un medio de defensa. (Usarla) se basa en lo que llamamos 'ataque en represalia': si nos atacan, respondemos", apuntó.

Este contenido se hizo gracias al apoyo de la comunidad de El Destape. Sumate. Sigamos haciendo historia.

SUSCRIBITE A EL DESTAPE

No obstante, añadió que "la amenaza de una guerra nuclear está creciendo" y culpó de esto a los estadounidenses y europeos, que dan un fuerte respaldo financiero y militar a Ucrania.

El mandatario ruso acusó además a la ONU y a otras organizaciones internacionales, así como a los medios de comunicación occidentales, de tener una actitud tendenciosa antirrusa ante la ofensiva de Moscú en Ucrania y de propagar "mentiras flagrantes".

El líder ruso señaló que la mayoría de las organizaciones de derechos humanos occidentales consideran que Rusia "simplemente no tiene derecho a existir".

Putin advirtió que su país continuará luchando por "sus intereses nacionales".

"Sólo puede haber una respuesta por nuestra parte: una lucha consecuente por nuestros intereses nacionales (...) lo haremos de diferentes maneras y por diferentes medios; en primer lugar, por supuesto, nos centraremos en los medios pacíficos, pero si no queda otro remedio, nos defenderemos con todos los medios a nuestro alcance", aseguró.

Asimismo, reconoció que el conflicto puede ser un proceso "largo", pero señaló los "significativos" avances logrados, en alusión a la anexión de Jarkov, Zaporiyia, Donetsk y Lugansk, cuatro provincias ucranianas, pese a que en las últimas semanas las tropas rusas se vieron obligadas a retirarse de la ciudad de Jerson.

A ojos de Moscú, con la aparición de estos "nuevos territorios", el mar de Azov sería ya territorio "interior", rodeado por áreas que pertenecen a la Federación Rusa, informó la agencia de noticias Europa Press.

Putin sigue defendiendo los referendos con los que su Gobierno justifica la anexión de estas cuatro provincias, ya que, a su juicio, mostraron que la población de estas regiones "quiere estar en Rusia" y "se considera parte de este mundo".

Sobre la evolución militar de la ofensiva, el mandatario descartó una nueva movilización de tropas.

"Simplemente no tiene sentido hablar de algunas actividades adicionales relacionadas con la movilización, ni el Gobierno, ni el Ministerio de Defensa las necesita", dijo Putin.

El líder detalló que de los 300.000 movilizados el 21 de septiembre (poco más del 1% de los recursos disponibles), 150.000 se encuentran en la zona del conflicto, de los cuales 77.000 están en unidades de combate y "el resto está en la segunda o tercera línea, desempeñando las funciones de tropas de defensa territorial, o en entrenamiento adicional en la zona de las operaciones".

Con información de Télam